Conde-Pumpido rompe su silencio en 'De viernes': «Estoy seguro de que me drogó»

«Me ha tocado demostrar mi inocencia, además con una prueba diabólica porque lo que hay que demostrar es un hecho que no sucedió. Y lo que no ha sucedido no tiene prueba. De no haber tenido la suerte de contar con un sistema de vigilancia en casa, no habría podido demostrarlo. Y aún prevalecería la versión de la supuesta víctima», reivindicaba Cándido Conde-Pumpido en su primera aparición televisiva tras archivarse la denuncia por supuesta agresión sexual debido a las contradicciones de la denunciante, Aline. Lo hacía en 'De viernes', en Telecinco, y detallaba lo sucedido entonces.

«Lara Dibildos y yo rompemos a mediados de octubre y, días después, coincido con ella (Aline) en un local de Madrid. No la conocía de antes, pero parece que ella tiene interés en mí. Nos conocemos y acabamos en mi casa. Una noche normal, no hubo ningún tipo de relación sexual en ese momento. No estaba en mis mejores condiciones después de la ruptura», arrancaba. Una excusa sirvió para propiciar un nuevo encuentro. «Ella utilizó una chaqueta que se había dejado en mi casa para volver a vernos. Y ahí surge una relación un poco más intensa, pero no pasa de ser algo circunstancial, nada estable», explicaba Conde-Pumpido.

El letrado desvelaba cuándo comenzó a sospechar que algo extraño ocurría con Aline. «Lara (Dibildos) puso en conocimiento público nuestra ruptura y amigos comunes me llamaban preocupados interesándose por la situación. Eso a ella le parecía desquiciante. No le gustaba que se estuviera hablando continuamente de mi expareja. Ahí es cuando yo intento coger algo de distancia», comentaba. Y continuaba su relato. «Llevaba días evitándola y llegó a presentarse en la puerta de mi casa, saltó la valla y se coló en el jardín. Pegaba gritos desde fuera celosa completamente, pensando que yo estaba con otra persona», recordaba.

La odisea no paraba. «Me dicen que me está buscando desesperadamente y me pongo en contacto con ella. Se plantó en mi casa porque traía comida por si necesitaba que me cuidara. Evidentemente, no era esa la intención. Creo que había algo preparado detrás. He valorado desde el simple despecho hasta la preparación de una trampa calculada», opinaba el abogado. 

«A mí no me contó que se dedicaba a la prostitución», precisaba Conde-Pumpido antes de seguir narrando su historia desde el momento en que la invitada llegaba a su hogar. «Me llamaron por teléfono sobre las doce o la una y ella entró en cólera», atestiguaba. Y aportaba más datos. «Hay grabaciones en las que se le ve manipulando las bebidas e introduciendo algo en ellas. Cuando traes algo que vas a verter en una copa es que es algo premeditado. Estoy seguro de que aquella noche me drogó», denunciaba Cándido que, tiempo después, se percató de que podía haber pasado algo más grave.

«Está buscada en Brasil porque, de un ataque de celos o de ira, acuchilló a una persona. Entiendo que en ese momento podría haber pasado cualquier cosa», aseveraba acusándola de mentir en todo momento. «Las contradicciones son continuas. No es que haya dado varias versiones, es que no ha dado una igual a la otra», declaraba. 

Sobre su estancia en el calabozo, Cándido también habló. «Es una experiencia que, si bien hubiera preferido no tener nunca, es algo que no me viene mal como abogado: saber qué pasan mis clientes en esa situación. El olor a calabozo es muy peculiar y es algo que tenemos que entender», manifestaba. Y pasaba a señalar supuestos culpables. «Había tenido varios avisos en los que se me había dicho que había personas que podrían no tenerme en buena estima que estaban montando algo contra de mí. Es más, he tenido debates con periodistas de algún medio de comunicación que ha puesto el ojo en mí», apuntaba.

«No creo que un periodista te haga una encerrona de este tipo», replicaban los colaboradores. Conde-Pumpido torcía el gesto. «Hay alguno que yo creo que sí, y en este caso voy a hablar de un medio, 'Okdiario', que se ha dedicado a publicar noticias en las que directamente te calumnian. Es un medio que se dedica a calumniarme», acusaba. Y sobre su relación con Lara Dibildos indicaba: «Le tengo mucho cariño. Precisamente en los momentos malos es cuando conoces a las personas, y ella ha sido un gran apoyo para mí. Esto también ha sido duro para ella».

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