Los Premios Talía de teatro y danza preparan su estreno en un escenario dominado por los Max

Es un cambio importante en un panorama que hasta ahora era un monólogo, pero Galán asegura que el objetivo «no es competir con los Max. Somos compatibles y yo tengo el corazón dividido, estoy en los dos bandos». Como autor pertenece a la junta directiva y el consejo de dirección de la SGAE, «que durante más de veinte años ha cubierto un vacío organizando los premios del sector. Los autores hemos pagado la fiesta del teatro español», enfatiza.

En cine hace años que conviven los Forqué que otorgan los productores, los Feroz de la prensa especializada y los Goya, cuyo protagonismo es indiscutible. En teatro, el tiempo dirá cómo se posicionan los Talía, que buscan «la excelencia» y «dignificar todas las profesiones» que hacen posible que se levante el telón. La principal diferencia es que para recibir un Max hay que registrar el espectáculo en la SGAE e inscribirse, mientras que la Academia no exige esos requisitos. «No hace falta ser miembro, no hay que apuntarse ni pagar ninguna cuota. Son como los premios nacionales, se eligen y se conceden». Grupos de trabajo integrados por académicos y expertos en distintas disciplinas elegirán a tres aspirantes en cada una de las 25 categorías, que abarcan desde autoría, dirección, interpretación (también de reparto) y vestuario hasta los cinco grandes que reconocerán los mejores espectáculos de teatro de texto, danza, musical, lírica y circo. Quedan fuera de la lista los montajes de calle y para público familar, que suelen dar muchas alegrías a los artistas vascos en los Max.

Los candidatos se anunciarán el 28 de febrero. Para la selección se tendrán en cuenta espectáculos estrenados entre el 1 de septiembre de 2021 y el 31 de diciembre de 2022, «muchos todavía en cartel y que han girado por varias comunidades autónomas», en todo el territorio español. Una vez designados los mejores trabajos, votarán de forma secreta y telemática todos los académicos (más de 700) en cada una de las categorías.

El resultado se sabrá el 27 de marzo. Han elegido esta fecha porque el Día Internacional del Teatro cae en lunes, jornada libre para los actores. Sin embargo, se plantean cambiar en próximas ediciones para distanciarse de los Max, que se entregarán el 17 de abril. Se avecinan semanas intensas para la profesión, ya que entre finales de febrero y mediados de marzo se darán a conocer los finalistas de ambos galardones.

Los Talía se entregarán en el Teatro Español, «el más antiguo, que fue un corral de comedias en el siglo XVII. El año que viene muy posiblemente lo haremos en el Teatro Real aunque nuestra intención es girar por toda España como hacen los Goya», indica Galán. La gala, producida por El Terrat, será retransmitida por La 2. La presentarán Cayetana Guillén Cuervo, presidenta de la Academia, «y otro actor que no se ha decidido todavía. Antonio Banderas va a estar abriendo y cerrando y dando premios». Aseguran que intentarán agilizarla «entregándolos de cuatro en cuatro o de cinco en cinco» e incluirán «números de grandes musicales»; probablemente de 'El rey león', que recibirá un reconocimiento especial del público por su éxito tras doce años en cartel.

Ya se han anunciado otros premios especiales. El Talía de honor es para Lola Herrera «por una vida entregada al teatro» que la ha convertido «en un símbolo». Ha hecho historia con obras como 'Cinco horas con Mario' y a sus 87 años sigue en activo. En la ceremonia se reconocerá también el talento emergente de la actriz María Hervás –que tras 'Iphigenia en Vallecas' y 'Jauría' encarna ahora a 'Yerma'– y el bailarín Sergio Bernal, uno de los más influyentes de su generación con una destacada trayectoria internacional. Completan esta primera fase del palmarés Antonio Resines, que recibirá el premio extraordinario que otorga Cantabria (cada año lo dará una comunidad), y el escritor y periodista Bob Pop, en la modalidad de cambio e inclusión social.

Además de alfombra roja, habrá actuaciones en la calle para celebrar el Día Mundial del Teatro y estudian colocar pantallas gigantes para seguir la ceremonia desde la calle. «Queremos hacerlo bien, que sea un espectáculo impecable», indica Galán. Uno de los factores que ha retrasado hasta ahora la iniciativa es que «organizar unos premios es muy caro, tienen que entrar desde el Ministerio de Cultura hasta el Ayuntamiento y contar con patrocinadores privados».

Entre sus objetivos está «la internacionalización» y por eso conceden también dos premios especiales al mejor espectáculo contemporáneo de autoría hispana representado en Nueva York y al mejor en el ámbito latioamericano. Los premios alargan la vida de las obras en cartel y celebran la magia del directo. «No hay que olvidar que el público de las artes escénicas triplicaba en 2019 el del cine español, y ahora hay más diferencia», incide Galán. «En cualquier municipio de 3.000 habitantes hay casa de cultura y teatros donde van compañías pequeñas y medianas, también grandes espectáculos», para mantener viva esa conexión.