Polémica en el Benidorm Fest 2025: las bailarinas de Chica Sobresalto denuncian incumplimiento de contrato

Leire Moro

Jueves, 13 de febrero 2025, 17:20 | Actualizado 17:57h.

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El Benidorm Fest 2025 ha terminado, pero la polémica continúa. Chica Sobresalto, nombre artístico de Maialen Gurbindo, se enfrenta a una dura acusación por parte de las bailarinas que la acompañaron en el certamen. María Pizarro, María José Arcas Mouliaá y María Gomis han hecho público un comunicado en el que denuncian el trato recibido por la cantante y su equipo tras su eliminación en la primera semifinal.

A través de un mensaje en las redes sociales, las bailarinas han querido visibilizar las condiciones laborales que, según ellas, siguen alargando la precariedad en el mundo artístico. «La profesionalización del arte no puede ser solo un discurso mientras se perpetúa todo lo contrario», señalaron.

Según explican, su acuerdo contemplaba un salario base, alojamiento individual, dietas cubiertas y permanencia en Benidorm durante las dos semanas que dura el concurso, independientemente del resultado en la competición. Sin embargo, denuncian que el equipo de la artista no dejó claras ciertas cuestiones desde el principio, como los contratos, las altas en la Seguridad Social y la gestión de los pagos.

El problema estalló cuando la candidatura de Chica Sobresalto no logró clasificarse para la final. En ese momento, las bailarinas recibieron un mensaje que les informaba que debían abandonar sus habitaciones cuatro días antes de lo previsto y regresar a Madrid de inmediato, sin ninguna alternativa.

La justificación, según explican las bailarinas, fue que su presencia ya no era necesaria y que los recursos económicos debían destinarse a otros miembros del equipo. Sin embargo, la verdadera sorpresa llegó cuando, según denuncian, se les comunicó que las habitaciones que iban a dejar vacías serían ocupadas por la banda de la artista que no formaba parte del festival. «La artista nos comunica que, por deseo propio, ha decidido que serán los miembros de su banda quienes pasarán a ocupar nuestras habitaciones y consumirán nuestras dietas, con el argumento de que tienen que trabajar en su próximo concierto», explicaron.

Las bailarinas intentaron buscar soluciones, pero afirman que sus propuestas no fueron escuchadas y que, durante cinco días, fueron ignoradas. Finalmente, recibieron el pago correspondiente y se intentaron subsanar algunos fallos, como su falta de alta en la Seguridad Social. Sin embargo, consideran que este tipo de situaciones no deberían repetirse: «Necesitamos que se construya con contratos firmados, con altas en la SS y con el mantenimiento de los acuerdos laborales».

Horas después de la denuncia pública, Maialen Gurbindo rompe su silencio y admite su responsabilidad en la decisión. Aseguró que en ningún momento se dejó de pagar lo acordado y que su intención nunca fue perjudicar a las bailarinas.

Según explicó, en un primer momento decidió dormir fuera del hotel para que ellas tuvieran habitaciones individuales, pero tras la eliminación del Benidorm Fest, la situación cambió. «Pregunté si teníamos que quedarnos allí y me comunicaron que sí, pero que las chicas podían volver», declaró.

Maialen también admitió que optó por quedarse en el hotel con su banda para trabajar en futuros proyectos, utilizando las habitaciones y dietas asignadas a su equipo. No obstante, este argumento no ha convencido a muchos seguidores, quienes han criticado el uso de los recursos proporcionados por RTVE para fines ajenos al festival.