El Gobierno vasco destinará a Cultura 75 millones en 2024, una subida del 6%

Hay que descontar además las partidas de Deportes y Política Lingüística para llegar al núcleo de las cuentas de Cultura: 40,1 millones destinados a promoción -con ayudas para creadores y entidades- y 35,1 para el patrimonio, que incluye museos, archivos y bibibliotecas. Suman 75,2 frente a los 71 de este año, así que en este caso el crecimiento, del 5,9%, también se sitúa por encima de la media. Se nota en partidas como la del Museo de Bellas Artes, que afronta una fase crucial de las obras. En 2024, el año en que está prevista su finalización, recibirá 647.000 euros para la reforma junto a 2,2 millones para gastos de explotación y 300.000 euros para inversiones.

Para el Guggenheim se han reservado 8,3 millones en tres partidas: 5,4 para gastos operativos, 1,4 para el acuerdo de gestión con la Fundación norteamericana y 1,5 para la compra de obras de arte, una senda que se retomó en 2020 tras años de parón por el impacto de la crisis. El Artium también aparece en varios epígrafes y recibirá una aportación de 1,3 millones, además de 150.000 para inversiones, 200.000 para la compra de arte y 15.000 para conmemorar el centenario del escultor Néstor Basterretxea.

A la espera de las explicaciones de Zupiria, que presentará las Cuentas en el Parlamento el 8 de noviembre, la memoria del proyecto hace suyos los objetivos del Plan Estratégico de Cultura hasta 2028: «multiplicar las oportunidades de desarrollo del talento, enriquecer la oferta cultural y acercarla a la sociedad». Hay proyectos muy esperados como la reforma y ampliación del Teatro Principal de Vitoria, que se impulsará con 2,3 millones. En Gipuzkoa, el museo Balenciaga contará con 492.500 euros para gastos de explotación y 40.000 para inversiones. Se destinan 1,2 millones a la rehabilitación del Palacio Miramar y 607.000 para convertir el Palacio Zarautz de Getaria en un centro de interpretación dedicado a Juan Sebastián Elcano.

Es notable el incremento en el Instituto Etxepare, que pasa de 3,4 a 3,8 millones. En el programa de promoción de la cultura hay mucha letra pequeña, la que cada año buscan con insistencia entidades vascas que dependen en buena medida de estos fondos. El gran compromomiso presupuestario del Gobierno vasco en la Euskadiko Orkestra, a la que destina 9 millones, y 330.000 para la Joven Orquesta de Euskal Herria (EGO). También sobresale el presupuesto de explotación de Tabakalera, el centro internacional de cultura contemporánea ubicado en San Sebastián (1,7 millones).

Para la ABAO se han reservado 600.000 euros, cantidad idéntica a la de este año. Otras partidas que repercutirán en la oferta cultural vizcaína son las de la asociación Gerediaga, organizadora de la Azoka, (175.000 euros), Harrobia, el centro de innovación y producción escénica de Otxarkoaga, (65.000) y Pabellón 6 (52.000). El Zinemaldia cuenta con una aportación de 1,2 millones y la Quincena donostiarra recibirá 410.000 euros.