Eusko Ikaskuntza premia al activista y pensador Xabier Etxeberria Mauleón

Este galardón, que desde 1995 premia a los mejores currículos en Humanidades, Cultura, Artes y Ciencias Sociales, es fallado por un jurado en el que participan también representantes de las siete universidades del ámbito geográfico de Eusko Ikaskuntza. Etxeberria Mauleón (Arroitz, 1944) es doctor en filosofía y catedrático emérito de la Universidad de Deusto, destacando también su activismo por la paz y la reparación en Euskadi, así como en conflictos de Latinoamérica.

El galardonado ha agradecido la distinción que recoge a modo de «reconocimiento de todo un proceso realizado» a lo largo de una «larga»vida. «Lo tomo como un premio de la tarea realizada a nivel reflexivo y práctico, y de las relaciones que en procesos he mantenido con muchas personas, compartiendo compromisos e ideales», ha manifestado.

Según destaca Eusko Ikaskuntza, el pensador navarro ha dedicado un esfuerzo de décadas a «la comprensión de las identidades colectivas» desde la perspectiva de la ética y de los derechos humanos, siempre en el centro de sus reflexiones y de su labor docente y divulgativa. Notable ha sido su labor en la defensa de los derechos humanos de los pueblos indígenas de Latinoamérica a través del Instituto Pedro Arrupe.

Militante por la paz y la no violencia desde su juventud, Etxeberria ha trabajado por el diálogo y la reconciliación «basada en el reconocimiento del sufrimiento injusto de las víctimas de la violencia en Euskal Herria». Este compromiso le llevó a participar en Gesto por la Paz y, entre otras cuestiones, a elaborar el programa de escucha de testimonios de víctimas Adi-Adian y a colaborar estrechamente en los llamados encuentros restaurativos impulsados desde el Gobierno vasco.

Más allá de su trabajo con víctimas y con pueblos indígenas, el catedrático emérito de Deusto se ha volcado con las personas con discapacidad intelectual y del desarrollo. «Para su apoyo, asesoría e investigación en torno a sus derechos y los de sus familias, nació el movimiento Plena Inclusión en el que se halla plenamente implicado», recuerda Eusko Ikaskuntza, que concluye destacando «la hondura reflexiva, el rigor intelectual y la calidad moral» con la que el galardonado aborda «los problemas éticos de sociedades plurales a menudo marcadas por el conflicto».