No es tarea sencilla llevar a la modernidad una sociedad cultural privada mucho más que centenaria, empeñada en impulsar el conocimiento, los valores y la ... difusión de la música coral, es decir, no solo aportando a la educación y a la cultura las virtudes pedagógicas del canto coral, sino también contribuyendo a la difusión del repertorio sinfónico-coral o incluso a la recuperación de un valioso patrimonio musical a veces olvidado.
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Pues bien, todo ello ha constituido históricamente el reto de la Sociedad Coral de Bilbao, una centenaria aventura surgida de la iniciativa privada, cuyo presente alcanza gracias al apoyo de su patronato y al impulso de su gerente, Iñigo Alberdi, unas cotas de excelencia que le permiten afrontar el futuro con plenas garantías de pervivencia.
A saber, las exiguas aportaciones públicas a la institución o a su labor de conservatorio se compensan parcialmente con una esforzada labor de autofinanciación a base de patrocinios, la diversificación de su estructura abarca todas las edades, niveles y especialidades; la exigencia en la formación aumenta la calidad de su difusión y permite un valioso reflejo de profesionalidad, la investigación sobre el patrimonio musical aporta un plus a los objetivos y hasta su marketing de marca ofrece una imagen de prestigio cultural. Tradición coral centenaria, en fin, pero también dinamismo ante la moderna demanda cultural.
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