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La colección BBVA plantea un diálogo entre obras de arte
La sede de San Nicolás reabre como espacio de exposiciones y explora la espiritualidad en distintas épocas
Cerca de cuarenta obras realizadas por treinta artistas de todos los tiempos, algunas nunca exhibidas hasta ahora, seleccionadas entre un extenso fondo de nueve mil ... piezas de calidad museable que pertenecen a la colección BBVA. Una selección pequeña, una muestra de belleza contenida, como dice su comisario, el crítico y teórico del arte Alfonso de la Torre, que en su opinión tiene además la calidad de un museo imaginario. Es la nueva exposición inaugurada ayer en la sede histórica del banco vasco, que estará abierta hasta el 5 de junio en la Plaza de San Nicolás. Bajo el sugerente epígrafe 'Arte y espiritualidad. Imaginar lo extraordinario', el recorrido se distribuye en cuatro salas que proponen un encuentro y unos diálogos ciertamente poéticos entre las obras del arte antiguo y las creaciones de artistas del siglo XX y XXI.
Al inicio del montaje, casi como heraldo de una propuesta expositiva que invita a mirar y pensar, un óleo de Pablo Palazuelo de 1984 preside e indica en el antiguo patio de operaciones del banco la distribución de las salas. Es una obra abstracta, geométrica, de «líneas que sueñan», como ha escrito el comisario, para quien Palazuelo es uno de los grandes pensadores del arte en el siglo XX y quizás el mejor inductor para apreciar la importancia de la espiritualidad en la creación artística.
Caja metafísica de Oteiza
En la primera sala, donde se alude al nacimiento de la imagen de lo invisible, una caja metafísica de Oteiza enseña la captura de esa esencia del vacío que genera energía espiritual y física. En la siguiente, reflejando simbólicamente las imágenes del cielo en vergeles y paraísos o su reverso de desolación y muerte en desiertos y cementerios, dos sublimes paisajes amberinos, frondosos y barrocos de Teniers dialogan con la atemporalidad plástica en una foto de Ouka Lele o con el expresionismo abstracto de Esteban Vicente y la pintura matérica de César Manrique. El paso inmediato en el montaje es el más sugerente, al vincular bajo una narrativa de lo sobrenatural, de los éxtasis y los milagros, el imaginario manierista y renacentista de Luis Vélez y Juan de Soreda con la expresión gestual y emocional en el vídeo de una de las «apariciones» en cámara lenta de Bill Viola.
El final de la muestra tampoco desmerece. Lleva al espectador a pensar sobre la fugacidad de la vida en un diálogo visual y sonoro entre dos 'vanitas' de Sorolla, una foto de Marina Abramovic que mezcla el mundo doméstico y el místico; una obra organicista y matérica de Barceló y un vídeo de Alexandra Ranner que, al son de una cantata de Bach, simboliza con la cabeza de Orfeo cercenada por las Ménades el tema del sufrimiento que redime el alma humana. Es el bello colofón a una nueva y valiosa narrativa del arte propuesta en esta selección complementada con un apartado musical que está accesible a través de Spotify.
Compromiso con la cultura
Coincidiendo con el 157 aniversario de la puesta de la primera piedra en la construcción del edificio, la que fuera primera sede social del Banco de Bilbao en San Nicolás vuelve a reactivar con la inauguración de una nueva muestra expositiva su condición de centro cultural que complementa la amplia oferta de la ciudad. «Que esta nueva iniciativa tenga lugar en el origen del banco no hace sino confirmar en el momento oportuno nuestro compromiso con la oferta cultural de Bilbao», afirma Carlos Gorría, director Territorial Norte de BBVA. A la designación de la villa como sede para la ceremonia de entrega de los Premios Fronteras del Conocimiento que convoca la Fundación BBVA o al patrocinio que brinda esta última a instituciones culturales de la ciudad como el Museo Guggenheim, el Bellas Artes o la ABAO, ahora también se suma la reactivación de las actividades en San Nicolás. «Es la voluntad de apostar por el arte y la cultura como medios de transformar la vida de las personas», concluye el director global de Talento y Cultura de BBVA, Carlos Casas.
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