'Beti eskamak kentzen' rinde homenaje a los cinco siglos de oficio de las conserveras

Un oficio el conservero eminentemente femenino y con la friolera de cinco siglos de historia en Euskadi que ha dado lugar a populares coplas y canciones como 'Beti eskamak kentzen', tradicional tonada conservera que da nombre a la muestra comisariada por las historiadoras Amaia Apraiz y María Romano y que reúne el legado –a través de objetos, fotografías y testimonios– del oficio que levantó la economía de localidades costeras vizcaínas como Bermeo, Ondarroa, Lekeitio o Elantxobe.

Todo ello gracias a la fuerza trabajadora de las mujeres que, excluidas tradicionalmente de la pesca, sí fueron quienes dominaron la manufactura del pescado, ya desde el siglo XVI. «En estas fábricas de nuestra costa, donde parte de la pesca se convertía en afamados productos que se vendían en latas o tarros de cristal, trabajaron y trabajan cientos y cientos de mujeres», ha reivindicado la presidenta de Juntas Generales de Bizkaia, Ana Otadui.

Es en estas trabajadoras, «que como tantas veces ha ocurrido han quedado en un segundo plano», en laque se centra la exposición que «pone nombre a muchas de las mujeres que con sus dedos desmigaron bonitos y anchoas para que luego otros los disfrutaran», según ha añadido Otadui.

Por su parte, la historiadora Amaia Apraiz ha explicado que la muestra es «una mirada a estas mujeres que combinaron el ámbito laboral con el personal» realizando muchas sacrificios en su vida y que «hoy en día siguen sosteniendo» el sector conservero. «Hay presencia de mujeres documentada desde el siglo XVI», ha detallado María Romano, la otra comisaria de la exposición.