Alberto San Juan recrea las vivencias de Lorca en Nueva York
Evocará en Pabellón 6 la conferencia en la que el poeta expresó su rabia ante el crackde 1929. «Estamos hechos de vida, no de dinero»
ELENA SIERRA
Miércoles, 18 de diciembre 2019, 14:44
Si Federico García Lorca viajara hoy mismo a Nueva York, vería lo que ya vio en su viaje de 1929. Aumentado, eso sí, pero en ... realidad lo mismo que vio entonces. ¿Y qué fue? «Un sistema que pone en el centro el dinero, la fantasía o la ficción del dinero, y que desplaza la vida y lo vivo del centro de la sociedad», explica el dramaturgo, director y actor Alberto San Juan. «Y estamos hechos de vida, no de dinero», continúa. Es lo que señaló el poeta granadino en la obra que nació de aquel viaje realizado entre junio de 1929 y febrero de 1930, que coincidió con el crack económico o «el hundimiento de la Bolsa y la mayor crisis previa a la que aún hoy sigue abierta, aquella que degeneró en los fascismos y una guerra mundial».
El poemario 'Poeta en Nueva York' fue, a su vuelta a Madrid, presentado en la Residencia de Señoritas, el equivalente femenino a la Residencia de Estudiantes -«igualmente lleno de talento», señala San Juan-. Lorca dio una conferencia y recitó varios poemas. Fue muy duro, contundente. Venía rabioso por lo que había visto, por la opresión y por la muerte. Dijo que había visto cómo hasta la ciudad llegaban «ríos de oro de todo el mundo y con ellos la muerte». Y así lo contó a su público. «Habla contra el sistema capitalista, que es antagónico no solo de la buena vida, sino de la vida misma. Y habla de la necesidad de terminar con él, y no lo dice de forma suave. Habla de cortarle la cabeza».
Vivir libremente
Cómo lo explicó, cómo lo vivió, es lo que Alberto San Juan representa mañana en Pabellón 6 (20.00 horas). 'Nueva York en un poeta' es el título que se le suele dar a esa conferencia con poemas que no tuvo título, y que el madrileño recrea tal cual fue. «Todo el valor reside en la palabra», explica el actor, que en otros lugares ofrece el formato musical. «La música potencia, pero, por otro lado, sin música es la palabra pura». San Juan entra en la sala «como él entró en el salón de actos» y, en un escenario desnudo, cuenta «la historia que él contó».
Fue un viaje que marcó al poeta, pero escribir y hablar «contra la opresión social y a favor de la lucha para vivir libremente» fue una constante en su obra. «El gran tema de Lorca es el deseo humano oprimido por una sociedad que no le deja ser como es. Toda su obra trata de esa tensión entre opresión y voluntad de emancipación». El poeta descubrió a los descendientes de esclavos, las minorías oprimidas también allí en la gran ciudad, y fueron para él «como los gitanos en España, los oprimidos» al mismo tiempo que «una esperanza de sublevación porque estaban aún más cercanos a la verdadera naturaleza humana».
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