La nueva cantina moderna de Bilbao para comer o picotear a cualquier hora… y probar bikinis sorprendentes

La nueva cantina moderna de Bilbao para comer o picotear a cualquier hora… y probar bikinis sorprendentes

Este nuevo local de Colón de Larreategui ofrece desayunos a diario, brunch los fines de semana y sándwiches elaborados con ingredientes originales, como el de oreja de cerdo o el de pastrami de lengua de res

Silvia Andrés

Domingo, 5 de octubre 2025, 19:06

El Treze, un nuevo espacio gastronómico en Bilbao, abrió sus puertas el pasado mes de agosto, justo en unas fechas tan complicadas como Aste Nagusia y, además, en uno de los centros neurálgicos de la fiesta, en el número 13 de la calle Colón de Larreategui. «No fue intencionado, pero resultó así y la verdad es que funcionó muy bien. Nos amoldamos a la situación, así que lo que más hicimos fueron bocadillos», explica Jon Ander desde El Treze. Fue todo un bautismo de fuego, pero no podía salir mal, ya que este nuevo local está respaldado por la experiencia que acumulan sus responsables en otros espacios como Clandestino Tap Room o La Pizarra, ya consolidados como referentes de la oferta gastronómica bilbaína.

Publicidad

Tras las fiestas, el local ha desplegado casi todo su potencial -aunque aún prepara novedades-, con propuestas para cualquier hora del día, un concepto que hasta ahora se echaba en falta en Bilbao. Desde que se cruzan sus puertas, se percibe la intención de El Treze de romper con la idea tradicional de restaurante. «Nos gusta definirlo como cantina, porque en cuanto entras hay una pequeña panadería con bollería fresca y pintxos, anchoas gourmet o encurtidos caseros, siempre con una apuesta clara por los productos de kilómetro cero», detalla Jon Ander. Después, el visitante se adentra en un espacio amplio, luminoso y muy estético, con capacidad para 80 comensales y con detalles que invitan a fotografiar cada rincón y plato: un guiño a los amantes de lo visual sin perder la calidez de una cantina moderna. «La verdad es que es muy instagrameable», confiesa entre risas Jon Ander.

Bikinis de sabores sorprendentes

En cuanto a la carta, las posibilidades son muchas y variadas. «Tenemos desayunos, brunch los fines de semana, vinos ecológicos, menús del día y degustación, picoteo, bocadillos y nuestra propuesta estrella, el bikini», explica Jon Ander. El bikini es una especie de sándwich, pero elaborado con ingredientes diferentes y sorprendentes; que nadie espere el clásico de jamón york y queso. Nada más lejos de la realidad: en El Treze se puede probar, por ejemplo, un bikini de pastrami de lengua de res con rúcula, salsa de mostaza e higos y pepino encurtido, o el Minutéjos, un emparedado de oreja de cerdo laminada a la plancha con salsa brava vizcaína que está gustando mucho. «Mucha gente se sorprende cuando le dices que es de oreja de cerdo, pero cuando lo prueban acaban encantados por su sabor y textura», revela Jon Ander.

Ya desde primera hora de la mañana se puede empezar con un café de especialidad y bollería fresca, y más tarde continuar con el picoteo: croquetas de gallina asada con mayonesa de trufa, boniatos fritos con salsa brava vizcaína o el popular prawns roll, un brioche relleno de langostinos en tempura. Por su parte, el menú del día, disponible de lunes a jueves por 23,50 euros, ofrece platos tradicionales con un giro contemporáneo y con productos de cercanía: bistec de ternera con cremoso de patata, lomo de bonito sobre crema de piperrada, huevos fritos con paletilla ibérica o la clásica marmita de alubias pintas con sacramentos, siempre con pan y bebida incluidos. Para los que buscan un plan más sofisticado, el Menú Degus (35 euros) incluye elaboraciones como txipirones braseados al Oporto, langostinos al horno con aderezo de Martini Rojo o duxelle de setas y foie, con aperitivo, postre y bebida.

Brunch los fines de semana

Para las mañanas del fin de semana, el 'brunch' de El Treze ofrece distintas opciones para todos los gustos. El Soft Brunch (15 euros) combina café o infusión, yogur con fruta y granola, zumo natural y tostada con tomate y jamón; el Sweet Brunch (16 euros) apuesta por el toque goloso con yogur, crema de cacahuete, tarta casera y bebida caliente de especialidad; el Healthy Brunch (15 euros) propone un nutritivo açaí bowl con frutas frescas y licuado natural; y para quienes buscan una experiencia más abundante, el Botxo Brunch (25 euros) suma huevos al gusto, jamón o bacon, guacamole, repostería casera y una mimosa.

Publicidad

La respuesta del público no se ha hecho esperar. «Ha pasado poco más de un mes desde la apertura y ya tenemos clientes habituales. Es una zona con muchas viviendas y oficinas, y la gente está encantada de encontrar propuestas con productos de cercanía. Eso es exactamente lo que nosotros ofrecemos», celebra Jon Ander.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Accede todo un mes por solo 0,99€

Publicidad