El soterramiento de La Avanzada logra reducir un 30% el ruido del tráfico en Leioa
La obra entra en su fase final a falta de colocar las últimas pantallas fonoabsorbentes en ambos lados del túnel y la realización de pruebas de seguridad
Si usted es uno de los 114.000 conductores que atraviesan cada día La Avanzada a su paso por el centro de Leioa seguro que ... se ha dado cuenta de que los dos tramos de carretera que hasta hace muy poco permanecían al descubierto ya han sido completamente tapados. Se ha alargado la cubierta del túnel por ambos extremos, se ha retirado una rotonda y también un cambio de sentido. Todo ello con el objetivo de eliminar la trinchera que partía el municipio en dos, un reclamo vecinal histórico desde que en 1988, hace casi cuarenta años, se ampliara esta vía que une la zona de Getxo y Uribe Kosta con el puente de Rontegi.
Las obras para cubrir la BI-637 arrancaron en abril de 2023 con un presupuesto de 65 millones de euros. La previsión es que los trabajos concluyeran durante el verano de 2026, pero será un año antes cuando la Diputación saque las máquinas que aún trabajan sobre el terreno. Todavía quedan por colocar las últimas pantallas fonoabsorbentes en las dos bocas del tubo y realizar pruebas de equipamiento y seguridad. Trabajos que podrían considerarse menores una obra de «microcirugía urbana». Lo que ya es palpable es el nuevo bulevar que se ha creado en Leioa gracias a la cubrición de la trinchera. Un espacio de 620 metros de largo recuperados para la ciudadanía. 18.000 metros cuadrados que se han destinado a recorridos peatonales, zonas de estancia y esparcimiento. Una zona que se convertirá en un nuevo pulmón verde -se plantarán más de 20.000 ejemplares de distintas especies- de una localidad castigada desde hace décadas por la contaminación acústica y atmosférica.
Pero más importante que la parte visual, son los efectos que ya ha tenido la cubrición de la BI-637 a su paso por Leioa. El objetivo de reducir el ruido que cada día soportaban los vecinos que residen en los laterales de la carretera ya se ha cumplido. El ruido ambiental se ha reducido un 30% en dos años. Los datos los ha aportado este lunes la diputada general, Elixabete Etxanobe, durante una visita a las obras a la que también han acudido el diputado de Infraestructuras y Desarrollo Territorial, Carlos Alzaga, y el alcalde de la localidad de la margen derecha, Iban Rodríguez.
La responsable foral ha detallado que los estudios acústicos realizados antes de 2023, previos al inicio de obras, reflejaban unos niveles de ruido medios de «hasta 77 decibelios», superiores a lo recomendado por la Organización Mundial de la Salud. Ahora, una vez la trinchera ha sido cubierta, los registros apuntan «a 51 decibelios», niveles que podrían incluso reducirse cuando se terminen de colocar las pantallas fonoabsorbentes en los dos extremos del túnel. En total hay previsto instalar 4.000 metros cuadrados de paneles acústicos.
Un antes y un después
El alcalde de la localidad, Iban Rodríguez, ha asegurado que «el ruido ha dado paso al silencio» y lo que «antes dividía ahora conecta». Tanto él como Elixabete Etxanobe han asegurado que esta obra «marcará un antes y un después para Leioa», pero también para «la red viaria de Bizkaia». El trazado del nuevo bulevar de Leioa incluye a su vez un bidegorri que conecta con la red cicable del entorno.
¿Qué es lo que queda para dar por concluidos los trabajos? En el exterior retoques y en el interior, instalar los principales sistemas de seguridad y operación, como la señalización, ventilación, iluminación y demás aparatos de control. Según han detallado los impulsores del proyecto, se instalarán cámaras térmicas duales para la detección automática de incidentes y un sistema de rociadores «tipo diluvio» para actuar frente a incendios. Todos los sistemas de seguridad estarán centralizados en dos locales técnicos situados en los extremos del túnel. Una vez que las obras concluyan, la velocidad máxima permitida pasará de 80 kilómetros por hora a 60.
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