Los médicos advierten: "Las vacunas no son ningún capricho"
elcorreo.com
Viernes, 5 de junio 2015, 00:51
El caso del pequeño de seis años de Olot (Gerona) que lucha por su vida afectado de difteria, ha vuelto a reabrir el debate sobre la oposición de algunos padres a que sus hijos sean vacunadas. Los 'antivacunas', esgrimen motivos religiosos, ideológicos y estudios de, en ocasiones, dudosa validez científica para evitar que los niños sean inmunizados contra enfermedades que pueden llegar a ser mortales. En el extremo contrario, los sanitarios, que llaman a la responsabilidad y a seguir los calendarios de vacunación fijados por cada comunidad autónoma. ¿Quién lleva la razón? El presidente de la Sociedad Española de Epidemiología, Esteve Fernández, lo tiene claro: "Las vacunas no son un capricho, sino que son un instrumento muy eficaz y seguro para controlar e, incluso, erradicar enfermedades contagiosas".
En lo que supone una advertencia directa a los padres, el epidemiólogo pidió el pasado jueves a los grupos que se oponen a las vacunas "con argumentos sin base científica" que "se informen y consulten" a los profesionales médicos porque la vacunación "no sólo protege la salud del niño, sino a la sociedad". De hecho,apuntó que el caso del niño gerundense afectado con difteria podría haberse evitado. "De haber estado vacunado no se habría producido ya que se trata de una enfermedad "absolutamente prevenible de la que en las últimas décadas no se había registrado ningún caso", aseguró Fernández, que recalcó que el de Gerona se trata de un caso "aislado" que hay que "investigar, controlar y tratar" pero que no supone "ningún peligro" ya que, según su opinión, "se ha gestionado de forma positiva".
A juicio del experto, determinados colectivos optan por no inmunizar a sus hijos "muchas veces sin un fundamento científico que justifique esta decisión y defienden medicinas alternativas no probadas". Aunque el presidente de la Sociedad Española de Epidemiología reconoció que la cobertura en España es "muy alta" y que los que se oponen a las vacunas son "menos de lo que realmente aparentan". "En general, la población es consciente de que las vacunas no son un capricho y que hay que llevarlas al día para proteger a la sociedad de enfermedades", abundó el experto.
¿Recomendación u obligación?
En paralelo, algunos responsables sanitarios han puesto sobre la mesa la posibilidad de que en España la recomendación de vacunar a los pequeños pase a ser una obligación. Hoy en día, la ley española sólo contempla obligar a los padres a inmunizar a a sus hijos en ciertos casos y siempre con un mandato judicial. "El derecho a la salud pública está por encima de cualquier decisión individual sobre el niño, al que además asiste su derecho a proteger su salud", señalan los expertos. En este sentido, cada vez son más los políticos del ramo que piden un calendario de vacunación "responsable y obligatorio", tal y como reclamó el conseller de Salud de la Generalitat, Boi Ruiz, que está gestionando el caso del niño de Gerona. En declaraciones a la prensa, el político instó a abrir un debate sobre si es necesario establecer o no un marco legal que obligue a los niños a estar vacunados, aunque, según reconoció, "lo ideal sería que existiera un compromiso social voluntario de vacunarse".