España y Bélgica acuerdan mantener una estrecha colaboración sobre Hodei

Como ya ocurrió la semana pasada al término de la cumbre de jefes de Estado y de gobierno celebrada en Bruselas gracias a las palabras del presidente en funciones, Mariano Rajoy, ayer, el nombre de Hodei Egiluz volvió a estar muy presente en el Justus Lipsius, la sede del Consejo Europeo. Los ministros de Interior de los Veintiocho se citaron para abordar la gravísima crisis de los refugiados y a su llegada, el titular español, Jorge Fernández Díaz, aprovechó sus declaraciones a los medios para mostrar su pesar por el hallazgo del cadáver y anunciar que iba a celebrar un breve encuentro con su homólogo belga, Theo Francken, para «agradecerle su trabajo» y estrechar relaciones de cara a conocer qué pudo pasar en Amberes aquella madrugada del 19 de octubre de 2013.

No fue una reunión bilateral al uso, sino que estuvieron charlando durante bastante tiempo de pie, en los márgenes de la reunión. Además, el protocolo quiere que siempre se sienten juntos, así que el ministro español y el secretario de Migración y Asilo belga son viejos conocidos.

Fuentes diplomáticas explicaron que el acto estaba ya previsto de antemano y que tenía un componente eminentemente político. Así, acordaron establecer un cauce de comunicación «fluido y estable» entre ambas administraciones para estar al corriente de las nuevas vías de investigación que puedan abrirse, aunque los expertos son conscientes de la dificultad del caso. De hecho, se desconoce cuando podrá ser repatriado el cuerpo, momento en que Galdakao le rendirá un homenaje.

Un portavoz de la Fiscalía de Amberes consultado por EL CORREO explicó que «aún no hay novedades» de las muchas pruebas que se están practicando con la autopsia del cadáver. Fuentes de Interior señalaron en este sentido que el hecho de que el caso esté bajo secreto de sumario es un elemento añadido que dificultad cualquier trasvase de información. No obstante, matizaron que seguirán muy pendientes y recordaron que hace un año, efectivos de la Policía Judicial viajaron a Bélgica.