Las víctimas que llevan su testimonio a las aulas, premio Txema Fínez

Las víctimas que llevan su testimonio en primera persona a las aulas de los centros educativos de Euskadi han sido galardonadas con el Premio Txema Fínez a la promoción de la Justicia en su cuarta edición, según se ha dado a conocer esta mañana.

El jurado del premio, creado en memoria de quien fuera juez y viceconsejero de Justicia del Gobierno vasco, ha querido reconocer la valiosa aportación de estas personas a «la educación para la convivencia, comprometida con la paz, los derechos humanos y la justicia». El fallo señala que su testimonio nos ayuda a «enfrentar un tiempo de memoria crítica del pasado que hemos vivido y de construcción de una convivencia normalizada».

Llevar estas experiencias a los colegios vascos era el objetivo del Programa Víctimas Educadoras que el Ejecutivo autónomo puso en marcha en 2011, entonces en manos del PSE. A través de esta iniciativa se seleccionó y preparó a un grupo de víctimas de ETA y de violencias de otros signos (GAL, BVE...) para que ofrecieran en las aulas de cuarto curso de la ESO y de Bachiller sus testimonios con un objetivo educativo. En 2013, la Secretaría de Paz y Convivencia puso en marcha una nueva fase del proyecto, rebautizado como 'Adi-adian', que abrió la puerta a que participaran también víctimas de abusos policiales.

Alrededor de una veintena de víctimas participan en este programa. Entre ellas, Sara Buesa, hija del socialista Fernando Buesa, asesinado por ETA; Pili Zabala, hermana de Joxi Zabala, muerto a manos de los GAL, y candidata de Elkarrekin Podemos en los últimos comicios autonómicos, o Inés Núñez, cuyo padre, Francisco Javier Núñez, falleció como consecuencia de la brutal paliza que le propinaron varios policías en Bilbao en 1977.