EH Bildu plantea iniciar la creación de un Estado vasco de forma unilateral

Los partidos vascos han expresado sus frontales diferencias sobre el futuro del autogobierno vasco en las propuestas que han presentado hoy para ser debatidas en la ponencia creada al respecto en el Parlamento de Vitoria. El proceso concluirá, previsiblemente, con un proyecto de reforma del Estatuto o un «nuevo estatus jurídico-político» en palabras del Ejecutivo de Iñigo Urkullu, que se ha comprometido a buscar el máximo consenso posible entre las formaciones vascas antes de buscar un acuerdo con la Administración central. EH Bildu plantea poner en marcha la creación unilateral de un Estado vasco, el PSE apuesta por una actualización del Estatuto sin aventuras independentistas como la puesta en marcha en Cataluña, y el PP no descarta introducir cambios en la Carta de Gernika para adaptarla a los nuevos tiempos, aunque tampoco cree que sea prioritaria.

EH Bildu defiende iniciar un «tránsito unilateral» en Euskadi para la creación de un Estado propio basado en la «soberanía plena» en el que la voluntad de la sociedad vasca sea «el único límite» para su consecución. La coalición soberanista ha registrado esta mañana en el Parlamento su propuesta para un nuevo estatus político, un documento que se debatirá, junto con los del resto de los partidos, en la ponencia de autogobierno, que lleva trabajando desde el 27 de marzo de 2014 con la finalidad de consensuar una fórmula que permita modificar el actual marco jurídico político. Hoy concluía el plazo para que los grupos registrasen sus propuestas concretas.

El parlamentario de de la izquierda abertzale Unai Urruzuno ha asegurado que un nuevo estatus político soberano no es posible dentro del marco del Estado español «porque en Madrid nunca jamás van a reconocer a Euskal Herria como una nación». Por ello, EH Bildu aboga por crear las bases para «un proceso constituyente» que culmine en un Estado vasco con su propio sistema judicial, educativo, sanitario y de Seguridad Social, es decir, una «soberanía plena». Así, defiende convertir las estructuras autonómicas en instituciones soberanas hasta llegar a la constitución del Estado vasco «si así lo decide libre y democráticamente la ciudadanía».

Aunque la coalición soberanista no precisa en el documento cómo se llegará al Estado vasco y se refiere sobre todo al trabajo que debe realizarse desde la comunidad autónoma vasca, sí señala que todos los territorios que conforman Euskal Herria (Euskadi, Navarra y País Vasco francés) deben iniciar su propio «proceso constituyente», cada uno con sus propios ritmos y procedimientos, y siempre con el visto bueno de sus ciudadanos. A su juicio, sólo será posible llevar adelante este proceso con el apoyo de «una mayoría social amplia», por lo que la sociedad debe ser consultada «de alguna manera» sobre «cada uno de los pasos».

De manera paralela EH Bildu apuesta por que Euskadi, Navarra y País Vasco francés trabajen conjuntamente en distintos ámbitos e impulsen instituciones comunes al estilo de Udalbiltza, la asamblea de cargos municipales de la izquierda abertzale.

Urruzuno ha reconocido que «los procesos» de Euskal Herria y de Cataluña «no son iguales ni están en una misma fase política», pero ha destacado los puntos en común que unen a ambos pueblos. «Toda la andadura (soberanista) en Cataluña coincide con la propuesta de EH Bildu. No hay una posible bilateralidad con el Estado, por lo tanto planteamos un tránsito unilateral hacia un Estado propio», ha recalcado el parlamentario.

El PSE apuesta por el blindaje de competencias

Por su parte, la secretaria general del PSE, Idoia Mendia, ha instado hoy al Gobierno vasco a elaborar, con todos los materiales de la ponencia de autogobierno y las propuestas de los grupos parlamentarios, un texto articulado para la reforma del Estatuto.

La dirigente socialista ha presentado en Bilbao el informe de 40 páginas que ha elaborado su partido con su propuesta para la actualización del Carta de Gernika. A su juicio, el «orden de los factores» correcto sería realizar primero la reforma de la Constitución, «blindando» las competencias del Estado y de las autonomías para evitar «invasiones», y después abordar la reforma del Estatuto, aunque ha señalado que si la mayoría del Parlamento opta por no esperar el PSE también tomará parte en el debate.

Ha advertido de que los socialistas están por acordar los cambios del Estatuto y celebrar después un referéndum sobre esa reforma, pero que de ninguna forma darán «satisfacción a los nacionalistas si intentan desbordar el Estatuto y la legalidad en un camino hacia la independencia» ni apoyarán una consulta que divida a la sociedad.

«No permitiremos que en el País Vasco intenten llevarnos a un escenarios similar al catalán», ha aseverado Mendia.

El PP plantea reformar la LTH

El portavoz del PP en el Parlamento vasco, Borja Sémper, ha defendido tanto la Constitución española como el Estatuto de Gernika se pueden reformar, pero siempre «desde el consenso» y mediante un debate «serio y leal», con propuestas «concretas». La propuesta de los populares plantea que lo que Euskadi necesita no es reformar su Estatuto, sino las normas que vertebran política y administrativamente el País Vasco.

En este sentido, el PP apuesta por «profundizar en el perfeccionamiento» del Estatuto mediante reformas de la Ley de Territorios Históricos (LTH), la Ley Municipal y la Ley de Aportaciones, con el fin de dar más peso político a las diputaciones y a los entes municipales, acabando así «con el afán centralizador de los sucesivos gobiernos autonómicos».

En su propuesta, el PP sostiene que «son tiempos de reformas y de cambios», pero también de «políticas responsables», y supedita estas transformaciones a que conduzcan al «crecimiento económico y a la creación de empleo».

En una comparecencia de prensa, Sémper ha abogado por conseguir «unas instituciones más transparentes, más eficaces, más modernas y útiles». «El Estatuto de Gernika no presenta problemas graves que requieran de una reforma» urgente, ha señalado tras recordar que el PNV propuso hace tres años constituir una ponencia de autogobierno con ese objetivo, pero «los hechos han desmentido esta posición inicial» porque «no tiene voluntad de concretar lo que quiere hacer».

Sémper ha acusado al PNV de ser «desleal» al resto de formaciones ya que, una vez constituida la ponencia, dejó de hablar de reforma del Estatuto y empezó a utilizar un «eufemismo», el «nuevo estatus político», sin ninguna concreción. «Ha habido mucho postureo e indefinición calculada y partidista en esta ponencia y eso se tiene que cambiar», ha exigido.

A preguntas de los periodistas, ha aclarado que «el PP no niega la necesidad de acometer determinadas reformas constitucionales» pero para que se aborden tiene que haber «un debate sereno y alguien tiene que plantear qué hay que hacer».

En este sentido, ha opinado que lo que hace falta es «romper los corsés dialécticos en los que se mueven la política española y vasca en los que parece que nadie sale de su espacio de confort».

«Y en el caso de Euskadi esto se traduce en indefinición por parte de quienes gobiernan esta comunidad autónoma», ha apuntado.

Por otro lado, ha advertido de que Euskadi «tiene que huir como de la peste de lo que está ocurriendo social y políticamente en Cataluña» por el «desprestigio» en el que han caído las instituciones catalanas y por la imagen que proyectan los políticos. «La política catalana se ha convertido en un bazar» y «Cataluña está hoy peor que hace 10 años», ha lamentado.