Las picaduras de carabela se duplican en las playas vizcaínas
La afluencia a los arenales del territorio aumenta un 24% en el inicio de un verano con más días de sol que nublados
Agua caliente, más días de sol que nublados y carabelas portuguesas. Este es el resumen, a modo de telegrama, de la marcha de la actual ... temporada de playas en Bizkaia. La Diputación hizo ayer balance de esta primera parte de la campaña estival en la que, otro verano más, la presencia de los organismos urticantes se ha vuelto una constante. Hasta el 3 de agosto los socorristas habían asistido a un total 52 personas que por picaduras de carabelas y a otras 15 por las de medusas.
Ayer mismo cuatro arenales -Laidatxu, Aritxatxu, Laida y Laga- izaron la bandera blanca para advertir a los usuarios de la aparición de estos hidrozoos, cuyos tentáculos pueden medir más de 10 metros. Incluso ha habido días en que playas como la de Bakio o la de La Arena han izado la bandera roja y restringido el baño libre a causa de las también llamadas 'aguas malas'.
Las cifras de picaduras facilitadas ayer por fuentes forales doblan a las que se llevaban el pasado verano en Bizkaia a estas alturas de la temporada -entonces eran 25-, pero están lejos de las de 2023. Aquel estío se cerró con 348 intervenciones. Casi nada.
Pero aunque el foco suela ponerse en los últimos años en las carabelas portuguesas, por aquello de que son propias de zonas tropicales y subtropicales y menos frecuentes en las aguas del Golfo de Vizcaya o porque su picadura es muy dolorosa y en ocasiones requiere de tratamiento médico, esta especie no es la que más bañistas lleva hasta los puestos de los socorristas para pedir ayuda. El sabirón o salvario, un pez propio del Cantábrico que acostumbra a enterrarse en la arena, sigue encabezando esta lista. 135 bañistas los pisaron cuando se daban un chapuzón y se clavaron sus venenosas espinas.
Temperatura del mar
La cifra total de asistencias realizadas por los miembros de salvamento durante la primera etapa del verano ascendió a 1.302. La mayoría fueron por heridas (559), caídas (213) y rescates de bañistas arrastrados por las corrientes (88) en unas playas que han estado bastante concurridas. Hasta mediados de julio habían acudido a ellas 1,1 millones de personas, un 23,8% más que en el mismo periodo de la temporada de 2024. Arriatera-Atxabiribil y Ereaga han sido las más frecuentadas.
En este incremento de usuarios ha sido clave la bonanza meteorológica. Según los datos de Diputación, de los 47 primeros días de la campaña, «23 fueron soleados, 21 nublados o variables y 3 lluviosos». La temperatura del agua se ha situado además en valores superiores a los habituales. Inició el verano a unos «anómalos» 23 grados para esa época del año, según indicaron los expertos de Azti. Desde entonces apenas ha habido variación alguna. Ayer el agua de las playas de Bizkaia marcaba unos agradables 22,7 grados.
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