Mercabilbao quiere rodearse de fábricas de transformación de alimentos en Ortuella
Busca empresas que preparen y envasen productos frescos para generar una industria con más valor añadido
Ahora en Mercabilbao se venden lechugas, tomates y carne. El plan es que dentro de cinco años también salgan de su entorno ensaladas, lasañas y ... gazpacho. Incluso que investigadores ideen nuevas formas de envasado, técnicas de conservación o hasta productos innovadores que puedan ensayar en sus instalaciones. En fin, que ahora Mercabilbao es un lugar de venta de mercancías frescas y lo que quiere es convertirse en el epicentro de un complejo de referencia de la industria alimentaria.
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Esta es la filosofía que informa el cambio radical que ya están diseñando las instituciones vascas para la gran despensa de Bizkaia. El jueves revelaron que en 2027 Mercabilbao dejará Basauri tras medio siglo en ese municipio para irse a Ortuella. Allí, en la comarca minera, será el corazón de un 'campus alimentario' vinculado con el parque tecnológico de la Margen Izquierda. En la operación participan el Gobierno vasco y la Diputación de Bizkaia (como parte de la Red de Parques), además del Ayuntamiento de Ortuella y el de Bilbao (este último como propietario del 60% de Mercabilbao).
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Mayoristas y usuarios discrepan sobre la utilidad del traslado
Resumiendo: «Esto es algo más que un mero traslado», explica Xabier Ochandiano, concejal de Desarrollo Económico de la capital vizcaína y vicepresidente de Mercabilbao. Según revela, en la Red de Parques de Euskadi llevaban tiempo pensando en un campus alimentario y la reflexión coincidía con que la instalación de Basauri ya lleva años rozando el 100% de ocupación, lo que limita un crecimiento que más que deseable es ya necesario. Sólo hubo que unir ambos procesos.
La primera ventaja de trasladar Mercabilbao a Ortuella es que quedará en un entorno con suficiente espacio para permitir ampliaciones futuras. Pero lo fundamental es «ser el motor» de un campus alimentario, lo que viene a ser un polígono industrial pero en moderno y dedicado a este sector de actividad. «Se trata de dejar de ser únicamente un espacio para la comercialización de producto fresco entre mayoristas y detallistas para ofrecer una oportunidad de desarrollo a otro tipo de empresas», dice el concejal.
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La gran despensa de Bizkaia servirá de banco de pruebas para nuevos productos y desarrollos
Se refiere Ochandiano a lo que en el sector se conoce como cuarta y quinta gama de alimentos. La primera gama son los productos frescos; la segunda, las conservas; la tercera, los congelados; la cuarta, los productos cortados, pelados y envasados al vacío; y en la quinta estarían los precocinados y los productos listos para consumir. El foco se pone sobre las dos últimas. Se trataría de atraer empresas al entorno de Mercabilbao para que desarrollasen estos procesos y se alargase así la cadena de valor. Que se generase más negocio. Además, eso aumentaría la demanda de mercancías frescas en la instalación generando más empleo y más riqueza. Ahora trabajan en Basauri 1.200 personas, y la previsión es que en el campus de Ortuella, en total y contando con las empresas que se implanten, se eleven a 2.000.
Defiende Ochandiano que esta industria, la de la transformación alimentaria, está en un auge notable y más que lo va a estar por los hábitos de vida imperantes y crecientes. La gente cada vez tiene menos tiempo y menos ganas de cocinar o, al menos, de andar cortando y pelando alimentos, así que la previsión es que siga aumentando la demanda de productos de cuarta y quinta gama.
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Habrá que vender los terrenos de Basauri para adquirir suelo en la comarca minera
Diez millones en el banco
Hay otro aspecto más que tendrá su importancia en el ecosistema de Ortuella: la investigación y la innovación relacionada con la industria alimentaria. El concejal no se refiere solo al desarrollo de nuevos procesos, sino a «experiencias logísticas más sostenibles vinculadas con la 'última milla'», es decir, con el reparto a domicilio. Incluso se podrían potenciar nuevos modelos de negocio teniendo a Mercabilbao como banco de pruebas. En el plan de las administraciones ya se contempla que las futuras instalaciones incluyan distintos equipamientos con utilidades variadas que van desde digitalización de procesos hasta controles de calidad.
Hay cinco años para desarrollar todo esto, un tiempo en el que se deberán salvar procesos intrincados. El primero, diseñar el plan económico-financiero. Hay que tener en cuenta que Mercabilbao deberá vender los terrenos de Basauri para luego comprar el suelo en Ortuella. En este proceso deberá actuar de manera conjunta con la Red de Parques, que también adquirirá parcelas para los desarrollos aledaños. ¿Cuánto costará y en cuánto está valorada la parcela de Basauri? Ninguna de las dos cosas están determinadas. En cualquier caso, Ochandiano apunta que Mercabilbao tiene una situación solvente porque en términos patrimoniales dispone, además del inmueble, de «recursos en cuenta de más de diez millones». El negocio va bastante bien y cada año suma un beneficio de medio millón de euros.
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Este mismo año el Ayuntamiento licitará el proyecto del plan funcional, donde se determinará qué edificios habrá en Ortuella y el plan de usos. Lo que está por determinar es qué pasará en Basauri cuando se vaya Mercabilbao. Las administraciones apuntan hacia alguna actividad productiva, que es lo mismo que se busca para Zorrozaurre y otro buen número de suelos industriales de Bizkaia que ahora solo producen maleza.
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