«Hemos tenido que empezar de cero, sin ayudas»

Debido a su estado, se ha declarado su inhabitabilidad, lo que ha afectado a los negocios que se encuentran en sus lonjas, que desde hace mes y medio mantienen sus persianas bajadas, con una valla de seguridad delante, en la que permanece colgado un ramo de flores en memoria del joven Egoitz. Cerca de él volvió ayer a colocar Jone Municio un cartel para indicar que su tienda, Paraíso Jonelove, en la que vende productos eróticos, se ha trasladado varios metros más allá, a la calle San Juan.

«Tuve que rescatar todo lo que pude, muy poco, e irme a otro lugar, aquí cerca, para seguir con mi actividad. Ingenua de mí pensé que el Ayuntamiento me iba a poder ofrecer alguna de las tantas lonjas que tienen vacías, aunque fuera para guardar las cosas al principio, pero nada. He tenido que pedir una licencia nueva y pagar los mil euros que piden. No ha habido ninguna consideración», declara indignada.

Estima unos 14.000 euros de pérdidas en los productos de su anterior local, y relata que toda esta situación le ha generado problemas de salud. «Yo no soy culpable de lo que ha pasado y ahora tengo un montón de deudas. Lo más importante ha sido el chaval que ha muerto, y hay que ayudar a los que se han quedado sin casa, pero a los comercios también», reclama Municio. «No quiero que me regalen nada, pero alguna compensación de emergencia podrían tener. Empezamos de cero, sin ayuda», añade.

Lo mismo opina Estela Vicente, quien abrió en la calle Portu, poco después de Jone, hace seis años y medio, una clínica de tratamiento capilar y para eliminar piojos. «A los comerciantes no nos dan nada. Nos han dicho que pidamos una subvención, como cualquier apertura, para cubrir gastos de obra, nada más». El local en el que estaba hasta el incendio, «ha quedado destrozado» por el agua para apagar el incendio, relata. Ahora, también en la calle San Juan, acaba de gastarse más de 15.000 euros para poner a punto una antigua peluquería que ha cerrado por jubilación.

Las dos estaban de alquiler, como Janina Masedo, quien hace menos de un año abrió una agencia de viajes en el edificio incendiado. «Nos hemos medio acomodado en Getxo, pero me trasladaré a otro local en Barakaldo». Todas estas comerciantes piden más implicación del Ayuntamiento. Desde el Consistorio reconocen que «no existen ayudas para estas circunstancias», y que han tratado de facilitar el traslado en concreto de la tienda erótica. «Todo lo demás tienen que hacerlo a través de los seguros», añaden.