Plentzia reforzará la seguridad vial en la zona del Astillero

Con el fin de ganar seguridad, redistribuir el tráfico y evitar molestias a los vecinos del casco histórico de Plentzia y su entorno el Ayuntamiento local está poniendo en marcha una serie de medidas con las que aspira a lograr estos fines.

La primera ha sido la instalación de una serie de señalización vial específica y destinada a las autocaravanas, pero también a los vehículos de personas que no son de Plentzia y que, por error, acaban subiendo desde el Astillero a la parte vieja de la localidad, para dar allí la vuelta y volver sobre sus pasos hasta encontrar la salida de la localidad.

Para ello el Ayuntamiento ha colocado ya señales específicas prohibiendo el paso a las autocaravanas en las inmediaciones del centro de la localidad. Estos vehículos turísticos se meten con cierta frecuencia en la zona histórica y sus estrechas calles. Por sus dimensiones no les resulta fácil salir de allí, con las molestias que ello genera a los residentes de este barrio. Junto a estas indicaciones ha colocado, tanto en la rotonda donde confluyen Areatza Hiribidea y Mungia Bidea -la del ascensor-, como en la salida del aparcamiento situado junto a la parte trasera de la Casa Consistorial indicativos de 'todas direcciones', para redirigir el tráfico y evitar el acceso rodado a la parte vieja.

Pero estas no son las únicas medidas que tiene previsto aplicar en la zona el equipo de gobierno de EH Bildu encabezado por David Crestelo. El ejecutivo local ya ha encargado la redacción del proyecto para construir una nueva rotonda. Estará ubicada junto a la plaza del Astillero, «en la confluencia de las calles Erribera con Arbidea Aldapa», explica el regidor. Esto es justo en el inicio de la subida al casco histórico. Aquí se colocará una nueva señal indican que los vehículos deben tomar otras direcciones para salir de la localidad. «Se busca que los conductores no se metan por error en la parte vieja».

Pero las medidas van más allá. Para ganar mayor seguridad vial el Ayuntamiento ha recolocado varios contenedores de residuos para que los conductores tengan más visibilidad. Y más adelante «se repintarán los pasos de cebra con una nueva disposición», apunta Crestelo, y «se colocarán reductores de velocidad» del estilo cojín berlinés.

Precisamente este tipo de elementos lucen ya desde la pasada semana en las calles Mungia Bidea y Palankete para reducir la velocidad de los conductores en la que es una de las principales salidas de la localidad.

En este lugar el Ayuntamiento tiene proyectada una actuación más amplia y que busca dotar de seguridad a los peatones en el que está considerado uno de los 'puntos negros' para la seguridad vial en la localidad. El gobierno local dotará de acera a un tramo de 145 metros que carece de ella. Por allí los peatones caminan por el borde de la carretera, en un tramo por el que los vehículos circulan habitualmente a una velocidad superior a los 30 kilómetros por hora establecidos para esta calle. Construir esta acera costará 165.000 euros.