Los edificios de Erandio se convierten en el lienzo de muralistas voluntarios

«Situado en pleno corazón de la ría, Erandio es un claro ejemplo de transformación de anteiglesia a municipio industrial, pero que todavía hoy mantiene su carácter más rural», describen los organizadores del proyecto artístico 'BBK Landa Eremu Art'. En cada edición se selecciona un núcleo rural de Bizkaia y se propone un reto cultural diferente. El año pasado, Zalla inauguró la iniciativa con el artista Asier Pérez. Y en este ejercicio, la experiencia se desarrollará en la localidad con la intervención del muralista Pablo Astrain.

La dinámica de trabajo comenzará con la creación del grupo motor formado por el artista y vecinos que quieran sumarse de manera voluntaria. Empezarán con la recopilación colectiva de historias del pueblo. Con ello definirán los elementos e ideas que se plasmarán en uno o varios murales, cuya localización se decidirá a medida que avance el proyecto. Los erandiotarras podrán participar en todo el proceso, desde la recogida de información hasta la pintura de las piezas.

Astrain aplicará en el municipio el mismo procedimiento que ha seguido en los diferentes países donde ha pintado fachadas de edificios: «tratar de entender el marco que rodea el lienzo» para traducir al arte algo que pertenezca al lugar. «Un suceso histórico o un relato fortuito» pueden servir de inspiración para la pieza que se plasmará en el pueblo. El muralista, nacido en Donostia y criado en Algorta, implicará a los residentes para «contrastar y buscar un enfoque lo más sincero e íntimo posible». Asegura que es «un placer poder sumergirme en un proyecto así en casa, creo que tengo mucho que aprender de ella».

«Landa Eremu Art se convierte en una experiencia colaborativa de aprendizaje sobre el proceso artístico y sus resultados transformadores a través del conocimiento de las prácticas artísticas contemporáneas», señala Koldo Bilbao, coordinador de cultura, familias y mayores de la entidad bancaria. El proceso arrancó en julio con la convocatoria de BBK y la cooperativa Kultiba para elegir al artista que lideraría esta edición, dotada con 6.000 euros (gastos de creación de las piezas aparte). En la valoración de las candidaturas se tuvieron en cuenta criterios de calidad artística y originalidad así como del planteamiento del trabajo a desarrollar. Astrain se puso a la cabeza con su propuesta de arte callejero caracterizado por colores oscuros y pinceladas sueltas.

«Todo mi trabajo se ha contagiado de lo que se deriva de las relaciones sociales y el ser humano como objeto creativo», explica. El proceso se llevará a cabo hasta diciembre en al menos cuatro sesiones para investigar, seleccionar los edificios, hacer el boceto y pintar uno o varios murales.

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