Vecinos de Erandio vuelven a reunirse a favor de la zona verde de Tartanga

El movimiento Tartanga Berdea celebró la tarde del miércoles su primera reunión en la parte trasera del metro de Altzaga. Los residentes están en contra de la construcción de 400 pisos en el solar que el Ayuntamiento ha cedido a la sociedad foral Azpiegiturak, que a su vez lo utilizará como fórmula de pago a la constructora que se ocupe de la demolición y reconstrucción de dos manzanas en el corazón del barrio que sufrieron graves daños por una obra cercana y que tuvieron que desalojar 66 familias hace diez años, a quienes se devolverá su vivienda. «Somos un grupo de distintas edades y sensibilidades. Somos erandioztarras preocupados porque vamos a perder la única zona verde y para uso público que tenemos en el barrio de Altzaga. Lo público se defiende, no se vende», reclaman.

Precisamente, y aunque la cesión del solar se efectuó en agosto, el movimiento ha surgido poco después de que la sociedad foral publicara los pliegos de la operación, al constatar que «el suelo dejará de ser patrimonio público para pertenecer a una constructora privada». Los vecinos volverán a reunirse mañana a las 12.30 horas, en el propio terreno, junto al polideportivo de Altzaga. Hasta las 13.30, realizarán «un mosaico» de personas que aderezarán con «picoteo». El colectivo asume que todo el municipio tenga que pagar «las chapuzas de una empresa privada que se ha ido de rositas» por solidaridad con los vecinos desalojados, pero cree injusto que «este pago se realice con el único terreno para zonas deportivas que tenemos en Altzaga».

Ganemos se desmarca

Esta semana, a través de un comunicado, Ganemos Erandio se desvinculó de este colectivo. Su portavoz, Margarita Vicente, criticó que el «objeto de la polémica, la construcción en el solar de Tartanga, sea la única solución presentada al problema de las 66 familias». La segunda fuerza política en el Consistorio cree que la plataforma se ha creado para «evitar la enajenación de terrenos que son parte de la solución ofrecida» a los desalojados. Vicente defiende que «lo prioritario son los vecinos de Abaroa y su problema desde hace diez años». En este sentido considera que la solución pasa por «disponer de recursos y de la solidaridad de todos. Lo que no necesitan es la confrontación que esta plataforma busca. Dialogo y búsqueda de soluciones sin engaño de una vez», pidió.