De Larrabetzu a Durango, 15 kilómetros por bicipista en 2025
La Diputación anuncia la construcción de un gran bidegorri desde la localidad del Txorierri hasta Boroa, que dará continuidad al ya en obras entre Amorebieta y Iurreta
La apuesta de la Diputación de Bizkaia por la bicicleta como medio de transporte -y no solo de ocio- avanza decidida. Si hace tan solo unas semanas se confirmó la construcción de un gran bulevar ciclista y peatonal por la carretera de la ría entre Bilbao y Getxo, este lunes el responsable foral de Infraestructuras y Desarrollo Territorial, Imanol Pradales, ha desvelado el proyecto de construcción de una gran 'bicipista' que unirá Larrabetzu y Boroa, pasando por el polígono industrial de Erletxe, en Galdakao. En total, serán 7,9 kilómetros de una suerte de 'autopista' para bicis, lo que le convertirá en la infraestructura de este tipo más larga de todo el territorio histórico. Las obras están previstas que arranquen en 2024 y finalicen al año siguiente y supondrán una inversión de 20,6 millones de euros.
Este nuevo bidegorri dispondrá de una anchura de cuatro metros para bicicletas y dos metros para peatones «en espacios convenientemente diferenciados». A lo largo de esos casi 8 kilómetros hará falta levantar seis puentes para evitar las intersecciones con carreteras y, por lo tanto, con el tráfico motorizado. El trazado estará dividido en dos tramos.
El primero, entre Larrabetzu, localidad de entrada por el este al valle del Txorierri, y el polígono industrial de Erletxe. Tendrá una longitud de 3,4 kilómetros y discurrirá «referenciado» a la BI-30 (Corredor del Txorierri). Requerirá de una dotación de 9,0 millones de euros y el plazo de ejecución será de quince meses.
En Erletxe arrancará el segundo tramo, que permitirá a ciclistas y peatones llegar hasta Boroa, en Amorebieta. En su caso, tomará como referencia la autopista A-8 durante 4,5 kilómetros. El presupuesto será de 11,6 millones de euros y las obras también se prolongarán durante 15 meses.
Cuando esta 'bicipista' sea una realidad, un ciclista podrá completar los 7,9 kilómetros entre Larrabetzu y Boroa. Ya en Amorebieta aprovechar la red local de bidegorris para acceder a la otra 'bicipista' de 7,5 kilómetros que en estos momentos está ejecutándose entre esta localidad y Iurreta, donde varios ramales de carriles bici ya enlazan con Durango. Es decir, se podrá completar una ruta de más de 15 kilómetros con total seguridad y sin tener que compartir en ningún momento tramos con vehículos.
Pradales ha visitado precisamente esta mañana las obras de construcción de esta 'bicipista', que comenzaron en diciembre y finalizarán en marzo del año que viene. Discurre en paralelo a la A-8 durante buena parte del trayecto en una zona repleta de polígonos industriales –Tolsan, Zubieta, Arriandi y Mallabiena–, barrios dispersos –San Miguel de Dudea, Erkoles, Euba, Berna y Arriandi– y algún centro educativo, como la ikastola Lauaxeta. En estas obras la inversión prevista es de 12,7 millones, lo que eleva el montante total de estas dos 'bicipistas' más allá de los 33 millones de euros.
Tanto este trazado como en el anunciado esta mañana incluirá pantallas para mitigar el «impacto acústico y visual del tráfico motorizado», así como elementos de seguridad para garantizar el paso de ciclistas y peatones. Para reducir el impacto medioambiental, está prevista la «reutilización de residuos de la industria siderúrgica, la instalación de sistemas de iluminación led alimentados con energía solar y el uso de piedra natural para los apantallamientos, en lugar de los plásticos utilizados habitualmente para esta función».
Esta nueva 'bicipista' se suma, de esta manera, a las diferentes actuaciones en materia de «movilidad sostenible» por las que ha apostado la Diputación. Destacan sobre manera el bulevar por la carretera de la ría entre Bilbao y Getxo y el puente entre Erandio y Barakaldo. Ambos proyectos podrían suponer un desembolso de 36 millones de euros para las arcas forales. Es decir, la apuesta de la Diputación por las infraestructuras para bicicletas requerirá, en total, de cerca de 70 millones en los próximos años para «facilitar a la ciudadanía el uso de la bicicleta en lugar del coche privado para los desplazamientos diarios de corto recorrido». En estos momentos, según los datos que maneja de la Diputación, en Bizkaia se realizan a diario 680.000 viajes de menos de 8 kilómetros por motivos laborales o de estudios.
«La apuesta de la Diputación por la movilidad sostenible es estratégica y no tiene marcha atrás«, ha asegurado Pradales, que ha asumido que en los próximos años será necesario realizar una »labor pedagógica« para que los vizcaínos hagan suyo este »cambio cultural«. »Habrá que tener paciencia porque esto es una iniciativa de largo recorrido pero la experiencia de otros países, como Holanda, nos dice que es posible. Ellos nos llevan 40 o 50 años de ventaja. Trabajan desde la escuela para concienciar a la gente en el uso de la bicicleta«, ha explicado el diputado de Infraestructuras. »Nosotros tenemos que poner las infraestructuras. Tenemos que ponérselo fácil, cómodo y seguro a los usuarios y estas 'bicipistas' responden a esas necesidades«, ha añadido.
