Un informe zanja que todos los residuos hallados en Zaldibar estaban autorizados
Técnicos de Medio Ambiente examinaron durante un mes 38 zonas del vertedero tras su derrumbe y no han encontrado materiales sin permiso de depósito
Desde que se produjera el pasado 6 de febrero el derrumbe que segó la vida de Alberto Sololuze y Joaquín Beltrán la sombra de la ... negligencia rodea la actividad del vertedero de Zaldibar, propiedad de Verter Reciclyng. Desde el día del alud las familias de los trabajadores fallecidos -y la sociedad en general- reclama responsabilidades y respuestas por lo sucedido, una cuestión que deberán dirimir los jueces, una vez concluya la investigación que mantiene abierta el juzgado de Durango. Pero a lo largo de los meses también se ha hablado largo y tendido sobre los residuos que se han ido depositando año tras año en dicho vertedero y si la compañía tenía autorización para poder recepcionar todos los desperdicios que se han encontrado en la instalación.
Pues bien, en apariencia, los residuos que se han identificado en las distintas partes del vertedero tras el derrumbe tenían autorización para estar depositados en el mismo. Así lo revela un informe elaborado por técnicos de la Dirección de Administración Ambiental del Gobierno vasco tras una revisión «a fondo» efectuada sobre el terreno durante la segunda mitad del mes de febrero y la primera quincena de marzo. El estudio se realizó antes de que las obras de estabilización y búsqueda alteraran el estado en el que quedó el vertedero. Se analizó tanto el vaso de vertido como la masa deslizada por el derrumbe y que llegóa a la autopista AP-8. «No se ha hallado ningún material para el que el vertedero no tuviera autorización», concluye el informe al que ha tenido acceso este medio y que se basa en el estudio de 38 zonas del vertedero al detalle.
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Hasta 70 tipos diferentes
El vertedero tenía autorización para hasta 70 tipos de residuos distintos, aunque el 80% de las más de 510.000 toneladas recibidas en el último ejercicio corresponden solo a ocho, entre los que destacan tierra y piedras, rechazos de plantas de valorización, escorias de acero y fundición, lodos papeleros y residuos de construcción y demolición.
También se encontró amianto en varios puntos. Eso sí, como aclaran las imágenes del informe y las explicaciones, el depósito de este material peligroso en el vaso del vertedero siempre se encontraba bien empaquetado y solo se distingue fibrocemento al aire en la lengua de desperdicios colina abajo provocada por el derrumbe.
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