Etxanobe: «El túnel no es un capricho. Es la pieza que le falta a la red de carreteras»

Etxanobe lanzó un mensaje para los detractores de la galería, para aquellos que critican que se apuesta por un modelo centrado en el coche. «Una de las claves de la movilidad del futuro son las carreteras más seguras y que generen menos molestias, con nuevas variantes para sacar tráfico del centro de los pueblos y con medidas también que calmen el tráfico en los entornos urbanos», con «una red principal de carreteras que garantice la cohesión y el desarrollo económico».

La otra «clave», dijo, es «la mejora constante del sistema público de transporte». En ese sentido, indicó que mientras se construye el túnel bajo la Ría «iremos viendo cómo se pone en funcionamiento el nuevo servicio de Bizkaibus, más Bizkaibizi, las líneas 4 y 5 de Metro, los nuevos trenes en las líneas 1 y 2, e, incluso si se considera necesario, el túnel bajo la Ría estará preparado para coger una conexión ferroviaria entre estas dos líneas».

La diputada estuvo acompañada de Carlos Alzaga. Ingeniero de Caminos y Puertos (ha sido decano de este gremio hasta hace bien poco), el responsable de Infraestructuras negó que el subfluvial vaya a tener un efecto llamada, que vaya a generar mayor tráfico en el entorno. Hizo esta afirmación a pesar de que hay un estudio de la propia Diputación que alerta de este posible peligro. Alzaga sostuvo que la congestión de Rontegi se reducirá. Que de los 175.000 coches que pasan a diario se irá a un escenario con 137.000. Y que los beneficios se extenderán también a la recta de Max Center (A-8), donde se eliminarán 18.000 vehículos al día. Una cifra similar a la mejora que se prevé en La Avanzada. Etxanobe profundizó en este mensaje. «El túnel bajo la Ría nace de una pregunta que es bien sencilla: ¿Solucionamos el problema de Rontegi o nos quedamos de brazos cruzados?». Para la Diputación, dijo, la respuesta «es clara porque el puente ha llegado ya a su límite y lo saben bien las decenas de miles de personas que lo atraviesan a diario desde la A-8, el Txorierri o la Avanzada».

La diputada general también se mostró orgullosa de que el proyecto del subfluvial haya sido diseñado por empresas del territorio. En concreto, por Sener e Idom. Representantes de ambas compañías asistieron al acto. Etxanobe puso en valor la industria que girará en torno a la construcción de la galería. En este sentido, destacó el impacto económico positivo que tendrá su perforación. Una actividad que ha cifrado en 290 millones de euros y 4.300 nuevos empleos durante la fase de construcción.

De hecho, la dirigente foral subrayó la importancia de las carreteras en el tejido económico vizcaíno. «Es un factor fundamental que explica en gran parte el desarrollo económico y social del territorio. Imaginemos una Bizkaia sin la A-8, sin la Avanzada, sin los corredores del Txorierri, Munguialdea, Uribe-Kosta, Ballonti y Kadagua, sin la Supersur, sin los accesos a Bilbao por Miraflores, sin los túneles de Artxanda o San Mamés y sin los accesos al puerto. Bizkaia no sería lo que es hoy sin la visión y sin el esfuerzo realizado por los sucesivos gobiernos forales»,