Los ahorradores con deuda perpetua siguen ganando juicios pese a la caducidad
La Audiencia de Bilbao condena a una entidad financiera a indemnizar con 100.000 euros a una pareja por daños y perjuicios
ANA BARANDIARAN
Miércoles, 9 de noviembre 2016, 02:00
La puerta de los tribunales no está cerrada para los ahorradores con deuda perpetua de Eroski y Fagor, pese a que se estimaba que el plazo para presentar demandas terminaba este verano. La razón de esta presunción es que la denuncia por vicio en el consentimiento vence a los cuatro años y en el verano de 2012 las aportaciones pasaron a cotizar al mercado SEND con notables pérdidas y se informó a los titulares de su verdadero valor. Pero quedan vías abiertas. Laboral Kutxa acaba de ser condenada a devolver una inversión de casi 100.000 euros a una pareja en concepto de daños y perjuicios, una acción libre de la caducidad de los cuatro años. La entidad, además, no ha recurrido la sentencia a la Audiencia Provincial de Bilbao.
El matrimonio había vendido su casa y tenía el dinero en un plazo fijo y la idea de comprar una nueva vivienda. Un cuñado, gestor en Laboral Kutxa, les propuso invertir en aportaciones de Eroski, con gran demanda en ese momento corría 2007, y metieron casi 50.000 euros cada uno. En abril de 2010 las quisieron vender porque habían fichado un piso a su gusto. En la entidad les dijeron que no encontraban comprador, pero que era cuestión de tiempo y que no se preocuparan. Presentaron demanda en julio de 2014, demasiado tarde para el vicio en el consentimiento porque habían pasado más de cuatro años desde que pudieron ser conscientes del error (que no eran como un depósito). Pero la abogada pidió también daños y perjuicios y el juez se lo ha concedido.
El titular del Juzgado de Primera Instancia número 2 de Bilbao considera que Laboral Kutxa no informó bien del producto al no alertar del riesgo de perder el dinero y de su falta de liquidez. También cree poco idóneo ofrecer aportaciones a personas sin cultura financiera y con intención de comprar una vivienda al cabo de poco tiempo. Por la sentencia y los intereses de demora, la pareja ha recuperado cerca de 80.000 euros y además tienen las aportaciones, que pueden vender en el mercado al 24% de su valor nominal (23.330 euros).