Arcelor avisa que si no hay acuerdo sobre el plan de la ACB la planta seguirá cerrada

El rechazo del comité de empresa al plan para reanudar de forma parcial la producción de la Acería Compacta de Bizkaia (ACB) no ha hecho mella en Arcelor. La firma sostiene que si no se alcanza un acuerdo sobre la base de su propuesta -que incluye el recorte a la mitad de la plantilla-, «la planta seguirá cerrada». El órgano laboral rechazó el miércoles, nada más conocer los detalles, el proyecto de la dirección y, según insistieron ayer fuentes del mismo, solo está dispuesto a negociar sobre la base del mantenimiento del empleo y de la producción de 60.000 toneladas al mes, la cifra previa al parón iniciado en febrero.

La incertidumbre crece cada día que pasa entre los trabajadores de la planta, en suspensión de empleo desde hace cuatro meses, conscientes de los riesgos que tiene mantener cerrada la instalación durante un largo periodo. El único respiro que han tenido tras conocer los detalles del plan industrial de Arcelor es la disposición de la multinacional de ser flexible en los plazos para alcanzar un consenso sobre la aplicación de su iniciativa. En principio había fijado el mes de junio para cerrar las negociaciones con el objetivo de iniciar la producción en julio, durante algunos fines de semana al mes.

Como ya adelantó ayer este diario, la propuesta de la dirección de Arcelor contempla la consecución de ayudas del Gobierno vasco para formación, I+D+I y otros capítulos; la reducción de la plantilla de 300 empleados en un 50%; el recorte de salarios «de forma importante» y una «flexibilidad total y polivalencia máxima», así como una fuerte reducción de costes.

El sindicato LAB desveló ayer algunos detalles de la reunión de la dirección con el comité, en la que habría reconocido que la fábrica sestaoarra es «necesaria» y que había propuesto su reapertura porque no ha podido producir en otras plantas determinados tipos de acero debido «al elevado coste que ello conlleva».

La central sindical subrayó que con la propuesta de plan social de la dirección se demuestra que «ArcelorMittal no apuesta por esta empresa» y que su objetivo, «que no esconden, es ganar tiempo hasta que puedan desarrollar ese producto en otras plantas, y entonces, cerrar la acería de Sestao».

Nueva reunión

Por su parte, el comité de empresa está a la espera de mantener una nueva reunión con la consejera de Industria, Arantxa Tapia, para conocer de primera mano el contenido de la reunión que mantuvo con Arcelor el miércoles. Fuentes del departamento de Desarrollo Económico y Competitividad precisaron que en ese encuentro la consejera y su equipo recibieron la misma información que con posterioridad le fue facilitada al comité, y que han pedido a la dirección de la compañía más detalles.

El Gobierno vasco, añadieron las citadas fuentes, ha puesto sobre la mesa su disposición a colaborar con ArelorMittal con los instrumentos de que dispone, siempre que existan garantías sobre la actividad y el empleo en la ACB. Todo el proceso, en cualquier caso, apuntaron, se encuentra en una fase «muy preliminar».

Respecto a la situación en la planta de Zumarraga, donde se negocia ya el traslado de la mayor parte de la plantilla a otras fábricas de Arcelor en Euskadi y, sobre todo, en Asturias, el comité propuso ayer a la dirección de la multinacional que active más procesos de prejubilaciones en todas sus plantas de la comunidad autónoma para poder recolocar en ellas al mayor número posible de trabajadores de la factoría guipuzcoana.