Los socialistas europeos alertan de que la ACB puede encabezar «una larga lista de cierres»

La preocupación por el futuro de la Acería Compacta de Bizkaia (ACB) se mantiene en el nivel de alerta máxima después de que el eurodiputado socialista francés Edouard Martin advirtiera ayer en Bilbao de que si Europa no asume medidas defensa del sector del acero, la factoría de Sestao puede ser «la primera de una lista muy larga de cierres». Además, la publicación por parte de ArcelorMittal de los resultados del año pasado, con pérdidas multimillonarias, contribuyó a elevar la incertidumbre social y laboral.

Martin, ex sindicalista de ArcelorMittal y redactor de un informe sobre el desarrollo de una industria europea sostenible de los metales básicos, alertó de que el sector del acero vive una situación de «vida o muerte» y que si «Europa no se mueve» tanto el futuro de la ACB -que suspendió el jueves su producción- como el de numerosas otras plantas será el cierre. Si embargo, lamentó, este asunto, pese a la peticiones del Parlamento Europeo a Bruselas para la adopción de medidas, no figura en la agenda del Consejo Europeo del próximo 18 de febrero .

Advirtió también de que la crisis del acero, que en 2016 se enfrenta «a un año crucial», es un ejemplo de lo que le espera a otras industrias si Europa reconoce a China el estatuto de economía de libre mercado. El tiempo de debatir se ha acabado, avisó el político galo tras reunirse con los sindicatos UGT y CC OO. Y apostilló que es necesario adoptar «medias urgentes».

En su comparecencia, estuvo acompañado de la eurodiputada del PSE Eider Gardiazabal y de la secretaria de esta formación, Idoia Mendia, quien anunció que la semana próxima se reunirá con la dirección de ArcelorMittal para conocer «con detalle sus planes». Para el miércoles está prevista también una cita de los máximos responsables de la firma en España con el comité de empresa de la ACB, que fue pedida por los representantes de los trabajadores desde el momento en que se anunció la parada de la planta hace dos semanas.

Por otro lado, una delegación de los socialistas vascos viajará a Bruselas con miembros del comité de empresa para una sesión de trabajo con parlamentarios socialistas, que tiene como objetivo trasladar a la Comisión Europea la necesidad urgente de actuar.

Edouard Martin explicó, en referencia a China, que es necesario detener la «competencia desleal». Una de las medidas posibles, dijo, podría ser establecer un precio mínimo de venta y poner tasas a la importación del acero, tal y como ha hecho EE UU. En defensa de una actuación de este tipo, alegó que China tiene capacidad para producir el doble del acero que Europa consume al año. «Europa debe dejar de ser la tonta del mundo. Nos estamos comiendo a nosotros mismos», enfatizó.

Más dificultades en 2016

En medio de este complicado panorama, la noticia de que ArcelorMital perdió el año pasado 7.946 millones de dólares (7.133 millones de euros) no contribuyó a reducir la inquietud. El gigante siderúrgico, que tiene también tres fábricas Gipuzkoa con un millar de trabajadores (Olaberria, Zumarraga y Bergara), anunció una batería de medidas de reestructuración para hacer frente al hundimiento del precio del acero y del mineral de hierro. Las pérdidas de 2015 suponen multiplicar por más de siete los de 2014.

El problema, según informó la multinacional, no es de demanda, sino de la caída de los precios que ha provocada la salida al mercado de los excedentes de producción de China, cuya economía se ha desacelerado en los últimos meses.

Para 2016, la compañía espera otro año complicado, aunque apuntó que el periodo más difícil, los meses finales de 2015, pudiera ya haber pasado. Precisó al respecto que los precios chinos ya han repuntado desde los mínimos alcanzados el pasado ejercicio.

Según sus estimaciones, la demanda de acero debería permanecer estable este año por el crecimiento de Estados Unidos y la Unión Europea, lo que compensaría la desaceleración que experimentan los mercados emergentes.

El aumento de las pérdidas de ArcelorMittal fue recibido en la Bolsa española con una fuerte pérdida de sus títulos, que al cierre de la sesión de ayer fue del 5,68%, similar al registrado en otros mercados europeos.