El gasto en pensiones frena su aumento en Euskadi por el efecto de las reformas

No se han cumplido aún dos años y medio de la entrada en vigor de la reforma de las pensiones y sus consecuencias son ya palpables sobre las grandes cifras del sistema, al haberse producido una fuerte contención del gasto. Los efectos se dejan sentir de forma similar en todas las comunidades autónomas, y el gasto que en enero de 2013 crecía en Euskadi a un ritmo anual del 4,8%, en mayo de este año lo hacía al 3,2%. A nivel nacional sucede algo similar, porque el incremento del 4,8% de hace 29 meses ha pasado al 2,9%, según los datos publicados ayer por el Ministerio de Empleo. Este mes la nómina de las pensiones contributivas fue en la comunidad autónoma de 579,9 millones de euros, y la estatal, de 8.218 millones.

La reforma de las pensiones tenía como objeto adaptar los recursos de la Seguridad Social a la situación demográfica del país y, para ello, se tomaron una serie de medidas que buscaban, de manera simultánea, frenar el alza del número de pensionistas, alargando la edad de jubilación, y desacelerar la progresión de la cuantía de las pensiones, introduciendo cambios en el mecanismo de cálculo de las mismas. Además, se abandonó la referencia al IPC en la actualización anual de las prestaciones y se elaboró, para entrar en vigor en 2019, el denominado factor de estabilidad, que liga el incremento anual a factores como la esperanza de vida, el crecimiento económico, etc.

Fruto de todo ello es que el aumento del número de pensionistas ha comenzado ya a frenarse y ha pasado de registrar incrementos anuales en enero de 2013 del 1,6% al 1,2% de la actualidad, cifras que en el conjunto del sistema han pasado del 1,5% al 1,1%. A comienzos de mayo, la Seguridad Social pagó 528.668 prestaciones en el País Vasco y 9.278.782 en el conjunto de España.

Pensión media

Lo mismo ha sucedido con la pensión media, que ha pasado de crecer a un ritmo del 3,2% en la comunidad vasca, donde alcanzó en mayo los 1.097 euros, a hacerlo al 2% anual. En el conjunto de España sucede lo mismo, y los 886 euros de la prestación media son fruto de un incremento del 1,8%, cuando al empezar 2013 el ritmo era del 3,3%.

Los datos del ministerio permiten constatar de nuevo que Euskadi tiene las pensiones más elevadas, un 23,9% por encima de la media, lo que supone aumentar la ventaja en 0,5 puntos sobre la existente en el comienzo de la aplicación de las reformas. En este tiempo, una de las novedades ha sido que Madrid ha arrebatado a Asturias la segunda posición en la cuantía de la prestación media, con 1.048 euros al mes, aproximadamente un euro más que la del Principado.

La pensión más baja corresponde a Extremadura, con 741 euros al mes, mientras que por provincias es Almería la que se encuentra a la cola, con 717 euros. En el otro extremo de ese ránking está Álava, con 1.116 euros.

Por otro lado, la Seguridad Social dio a conocer ayer los datos de la ejecución presupuestaria de abril, que arrojan un «saldo positivo» de 3.783,36 millones de euros, frente a los 4.267,33 millones un año antes. Son datos engañosos para los no iniciados, porque cuando llegue el momento de pagar la extra de verano, el sistema deberá recurrir al fondo de reserva, como en años anteriores. Importante es el dato del incremento de la recaudación líquida, del 1,48% con respecto al primer cuatrimestre de 2014, pero los pagos crecieron a un mayor ritmo, del 2,22%.