La exposición 'Uraren Ondoan' recala en Amorebieta hasta el próximo 29 de noviembre

La sala de exposiciones del Centro Zelaieta en Amorebieta acoge una nueva exposición, hasta el 29 de noviembre, esta vez, del artista y arquitecto zornotzarra Iker Gandarias, que mediante sus obras explora la importancia del agua y la compleja interacción entre el ser humano y su entorno, fomentando la reflexión mediante el arte.

El hilo conductor de la exposición es el importante papel que juega el agua en la vida. El agua está presente en el día a día de cualquier persona, en el entorno, en las ciudades. El 70% del planeta está cubierto por agua al igual que ocurre con el ser humano. Partiendo de esa premisa, a través de sus obras, Iker Gandarias examina el papel crucial del agua en el crecimiento de ciudades y pueblos, y al mismo tiempo, subraya el impacto negativo de las actividades humanas en el ecosistema, invitando a la reflexión.

De este modo, la exposición contiene obras creadas con técnicas diversas como óleo, acrílico, acuarela, conté y lejía, siendo esta última especialmente notable por los resultados sorprendentes y distintos que ofrece, proporcionando una experiencia visual innovadora para el visitante.

En los trabajos de Gandarias, los desechos en los ríos se comparan con el «colesterol creado por el hombre», funcionando como una metáfora del proceso de deterioro ambiental. Sus obras, sutiles pero poderosas, invitan al espectador a reflexionar y comprometerse con un planeta más saludable.

Visita guiada y taller para aprender a pintar con lejía

Bajo el marco de esta exposición, el próximo miércoles, día 13 de noviembre, el autor de las obras, Iker Gandarias, ofrecerá una visita guiada a través de sus obras, explicando los detalles sobre las mismas así como las técnicas o el material escogido para llevarlas a cabo.

Además de ello, los días 15 y 22 de noviembre se llevará a cabo en Zelaieta un taller para aprender a pintar con lejía (es necesario inscribirse en Zelaieta).

El artista vive en la localidad y a día de hoy se dedica a la arquitectura. La precisión y la atención al detalle propias de la arquitectura están también presentes en su pintura, aunque para él, esta última es un medio de escape y una fuente de libertad. Sus obras reflejan un proceso creativo personal y terapéutico, que le permite liberarse de las tensiones diarias y alcanzar un equilibrio interior. Se ha presentado en varias ocasiones a los concursos de pintura al aire libre de algunas ciudades siendo tercer premio en Leioa y premio local de Amorebieta en dos ocasiones.

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