Un dique en el vertedero de Zaldibar permitirá reabrir en julio los cuatro carriles de la AP-8

El Gobierno vasco prevé reabrir en julio los cuatro carriles de la autopista AP-8 que quedaron cerrados al tráfico como consecuencia del derrumbe del vertedero de Zaldibar. Con este fin, el Departamento de Medio Ambiente, dentro de las tareas de estabilización en la escombrera, construye desde mayo un dique de escollera en la parte inferior del deslizamiento, que también permitirá asegurar la zona en la que se centran las labores de búsqueda de los dos operarios que permanecen sepultados desde el pasado 6 de febrero.

Esta actuación, que neutralizará posibles deslizamientos futuros y consolidará el terreno donde ya se ha buscado sin éxito a Alberto Sololuze y Joaquín Beltrán, complementará y reforzará los trabajos llevados a cabo en los últimos cuatro meses por la empresa foral Interbiak para proteger la AP-8. Unas obras que consistieron en la construcción de un dique de 50 metros de largo por seis de altura en el borde de la autopista y la instalación de una pantalla dinámica antialudes de 75 metros cuadrados unos cuarenta metros más arriba.

El muro de 25 metros que se está levantando encima de la plataforma de búsqueda B2 está compuesto por un núcleo de pedraplén de cantera, con un revestimiento externo de escollera trabada de dos metros de espesor. En su construcción se emplearán alrededor de 20.000 metros cúbicos de piedra caliza y su coste superará los 600.000 euros. Los trabajos comenzaron a primeros de mayo y se espera concluirlos en la primera semana de julio.

Mientras avanza la construcción del muro, continúan los trabajos para retirar con garantías los residuos que llegaron a cortar la A-8 y que, de manera provisional, fueron acopiados en un lateral de la autopista, así como los almacenados en las primeras jornadas de búsqueda de los trabajadores desaparecidos, que fueron depositados en la zona de la Cantera. Verter Recycling, la empresa propietaria del vertedero, ha procedido a caracterizar estos desechos y a proponer alternativas para su traslado y depósito seguros.

La solución autorizada por el Departamento de Medio Ambiente consiste en la apertura de una pista forestal que conecte directamente la zona de la autopista donde permanecen 6.500 metros cúbicos de residuos con el Depósito de Seguridad 1 construido en el entorno del vertedero. La firma se hará cargo de la ejecución y pago de este acceso directo, que permitirá a los equipos contratados por Medio Ambiente que el transporte de los residuos de la AP-8 se realice por el interior de la escombrera, evitando el paso de unos 650 camiones por zonas pobladas. Esta retirada de residuos concluirá a finales de junio, poco antes de que termine la construcción del nuevo dique de contención.