El alcalde de Gernika recibe el alta tras superar el coronavirus
Gorroño resalta que los primeros días «fueron un infierno debido a la fiebre» y que sale «fortalecido en valores humanos»
julen ensunza
Gernika
Viernes, 17 de abril 2020, 19:16
El alcalde de Gernika, José Mari Gorroño, descansa ya en su casa tras recibir a primera hora de esta tarde el alta médica en el hospital de Galdakao, donde ha estado ingresado los últimos 21 días al dar positivo en coronavirus. «Me siento un afortunado por poder volver con mi familia y, después de lo que he vivido, salgo fortalecido en valores morales y humanos», destacó el regidor nada más abandonar la décima planta del centro asistencial de Usansolo.
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Gorroño, que ingresó el pasado 27 de marzo por la noche con neumonía, destaca que «los primeros días fueron un auténtico infierno porque tenía mucha fiebre y apenas podía dormir». Una vez superado el proceso febril «llegó la inflamación de los pulmones y los problemas respiratorios que, por suerte, y gracias al gran trabajo de los servicios médicos, ha ido remitiendo», detalló.
Precisamente, el máximo mandatario de la mundialmente conocida como 'Ciudad de la Paz' ha querido destacar «el gran patrimonio que tenemos en Euskadi en el campo sanitario». «Además de unos profesionales de altísima cualificación como han dejado patente desde el inicio de la pandemia, tienen un valor humano extraordinario. Nunca olvidaré todo lo que han hecho por mí», resaltó.
Máxima precaución
Gorroño, que ha dado negativo en la prueba de Covid-19 que le han realizado antes de recibir el alta, deberá ahora seguir unas pautas concretas en los próximos 15 días para completar su recuperación. Y es que, entre los efectos visibles a simple vista que ha dejado el virus en su cuerpo se encuentra la pérdida de peso. «He bajado unos seis kilos y hay que ir recuperando fuerzas poco a poco», adelantó.
El regidor gernikarra lanzó, además, un mensaje claro a la ciudadanía después de vencer al Covid-19. «Hay que seguir al pie de la letra las indicaciones de las instituciones y de Osakidetza para frenar los contagios. Si algo tengo claro, es que no me gustaría que nadie pasase por lo que me ha tocado pasar a mí. Hay que ser cautos porque no sabes dónde te puedes contagiar. En mi caso, pese a extremar al máximo las precauciones, sucedió», ha concluido.
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