Bilbao busca cómo extender la actividad en la ría hasta La Peña, Bolueta y el Cadagua
Un estudio definirá en 2020 qué negocios se pueden montar en la lámina de agua para convertir el Nervión en la nueva Gran Vía de la ciudad
Si esta vez los plazos sí se cumplen, el año que viene Bilbao tendrá una hoja de ruta para devolverle a la ría el protagonismo ... perdido. Y no sólo a la ría. La intención es llevar la actividad más allá de la lámina de agua que sale en las postales y darle vida al Nervión tanto en Bolueta como en el tramo que va desde La Peña a San Antón. También se quiere actuar en el río Cadagua entre Punta Zorroza y Alonsotegi. En fin, la idea del Ayuntamiento es exprimir el medio acuático, sacarle provecho tanto como elemento de ocio como de generación de actividad económica, que en este entorno viene a ser lo mismo.
¿Cómo se hace eso? Con barcos turísticos, kayaks, piraguas, pantalanes con locales hosteleros, zonas lúdicas, paseos... La lista es muy larga. Ahora, únicamente dos empresas (Bilboats y Bilbobentura) tienen permiso para desarrollar su actividad en la ría. El Ayuntamiento no da más licencias de actividad porque dice que antes hay que conocer bien el cauce. Así que está esperando a ver qué dice el estudio que se adjudicó ayer a Typsa por 273.000 euros (IVA excluido). El plazo de ejecución es de once meses.
Este informe lleva por título 'Diagnóstico de la ría de Bilbao como eje dinamizador de la Villa a través de la actividades ligadas a la lámina de agua de su cauce y apoyadas en sus márgenes'. El concejal de Obras y Servicios, Asier Abaunza, recuerda que, en primer lugar, se trata de conocer el medio: los calados en las diferentes zonas de la ría, las corrientes, los distintos tipos de sedimentos... Se trata de una superficie viva, que cambia, y el Puerto ha dejado de hacer batimetrías desde que no la frecuentan los barcos. Es decir, ha dejado de tomarle el pulso. «Los datos que tenemos no están actualizados», explica el concejal. De manera que se trata de eso, de conocer cómo funciona el Nervión por debajo de la superficie.
Sólo cuando se sepa eso se podrá determinar qué se puede hacer en cada zona. Qué actividades desarrollar. También habrá que tener en cuenta el «análisis medioambiental», no vaya a ser que exista algún «anfibio o especie vegetal» cuya preservación en este entorno imponga limitaciones para según qué tipo de usos.
«Se trata de que la ría pase a ser un eje vertebrador de la ciudad, maximizar los usos con seguridad»
Asier Abaunza | Concejal de Obras y Servicios
Sin baño libre
«Se trata de que la ría pase a ser un eje vertebrador de la ciudad», dice Abaunza. Como una nueva Gran Vía. Aunque, de momento, rechaza su utilización como elemento para el transporte público colectivo. «Hoy en día eso no se está planteando».
En el equipo de Gobierno insisten en que se pretende «dinamizar el cauce más allá de la ría». Por ejemplo, facilitando el acceso al agua desde la zona peatonal junto a las torres de Bolueta para llevar a cabo actividades como kayak o piragüismo. También entre La Peña y San Antón y en el Cadagua, «donde ahora no hay nada». ¿Zonas de baños, quizá? No. Abaunza admite que aún estamos lejos de ese momento.
Con la contratación del estudio se da un paso fundamental en toda esta estrategia que siempre está sobre la mesa pero parece avanzar a la misma velocidad que la ría en marea alta. Hace más de un año el Ayuntamiento anunció la inminente licitación del informe, acontecimiento que no llegó hasta diciembre. Tras casi cinco meses de tramitación, llega ahora la adjudicación. El 'producto' final estará listo, si los plazos se cumplen, en primavera de 2020. De esos resultados están pendientes un buen número de emprendedores que desde hace años están viendo rechazadas sus propuestas de iniciar negocios vinculados a la ría porque aún no la conocemos bien.
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