Los ayuntamientos podrán descontar hasta el 90% del IBI a las familias numerosas y a las vulnerables
La Diputación también pemitirá que realicen bonificaciones extraordinarias sobre las tasas municipales «por razones excepcionales o de urgencia», como la pandemia
La comisión de Hacienda y Finanzas de las Juntas Generales ha aprobado hoy un proyecto de norma foral que introduce modificaciones tributarias con el objetivo de «mejorar la lucha contra el fraude», «armonizar» la fiscalidad de Bizkaia con la de los otros dos territorios históricos y «adecuar» la normativa vizcaína a las nuevas realidades jurídicas y económicas. La iniciativa, que deberá ser refrendada en el Pleno, ha sido aprobada con los votos favorables del PNV y del PSE, mientras que los tres grupos de la oposición (EH Bildu, Elkarrekin Bizkaia y grupo Mixto-PP Bizkaia) han rechazado o se han abstenido a la hora de votar el articulado. Las modificaciones están estructuradas en base a 12 artículos, de los que 7 se refieren a impuestos propios. Entre los cambios introducidos, por ejemplo, se amplía al 90% la bonificación posible en el Impuesto de Bienes Inmuebles que los ayuntamientos podrán aplicar a familias numerosas o en situación de vulnerabilidad.
De esta forma, los consistorios podrán regular en sus ordenanzas fiscales una bonificación de hasta el 90% de la cuota íntegra del impuesto a las residencias habituales de familias numerosas que no superen los 300.000 euros de valor mínimo atribuible y a los inmuebles de las familias que estén en situación de vulnerabilidad por ser perceptores de pensiones no contributivas, de renta de garantía de ingresos o del ingreso mínimo vital, «con especial atención a las situaciones de monoparentalidad y monomarentalidad». Además, el nuevo texto establece un cambio en la normativa para que las entidades locales aprueben bonificaciones extraordinarias sobre las tasas municipales «por razones excepcionales o de urgencia», como ha sido la crisis sanitaria provocada por la COVID-19.
Por otro lado, el límite para entrar en la lista de deudores pasa de un millón a los a 600.000 euros. Los contribuyentes que posean criptomonedas también deberán informar de los movimientos y saldos. Además, habrá deducciones fiscales cuando las empresas inviertan en la mejora del medio ambiente y en el aprovechamiento más eficiente de fuentes de energía, así como en actividades de investigación, desarrollo o innovación tecnológica, o para fomentar la capitalización empresarial en beneficio del emprendimiento y el reforzamiento de la actividad productiva.
La oposición pide una fiscalidad «más justa»
La oposición ha presentado 112 enmiendas: 25 de EH Bildu, 58 de Elkarrekin Bizkaia y 29 del grupo Mixto-PP Bizkaia (una de ellas a la totalidad). Todas ellas han sido rechazadas por el PNV y el PSE. En el debate, los grupos de la oposición han lamentado las «formas» reglamentarias utilizadas para incorporar este gran paquete de medidas tributarias a través de un solo anteproyecto normativo. El grupo Mixto-PP Bizkaia, Elkarrekin Bizkaia y EH Bildu han coincidido en señalar que «es hora» de plantearse una auténtica reforma fiscal que introduzca en el sistema tributario vasco una fiscalidad «más justa». Sus enmiendas, reservadas para el Pleno, estaban orientadas en su mayoría a introducir cambios en el Impuesto de Sociedades y en el IRPF. De esta forma, el grupo Mixto-PP Bizkaia, después de definir al proyecto normativo de «totum revolutum», ha pedido ampliar las deducciones en ambos tributos y una «necesaria», a juicio de su apoderada Esther Martínez, deflactación de la tarifa del IRPF debido a los «altos» niveles de inflación. Asimismo, ha reclamado, sin éxito, un aumento de las bonificaciones en las propiedades que pasen de padres a hijos, por ejemplo, en los impuestos de Sucesiones y Donaciones, y en el de Transmisiones.
Por su parte, Elkarrekin Bizkaia ha reclamado un tipo «mínimo objetivo» en la cuota a declarar y un límite máximo del 25% en el apartado de las deducciones en el Impuesto de Sociedades. Su gran paquete de enmiendas (27) estaba destinado a cambiar diversos aspectos del IRPF, como eliminar las rentas del ahorro que «privilegian más a las rentas más altas», según la portavoz, Eneritz de Madariaga. Asimismo, han pedido que se reduzca el tipo a las rentas bajas y se aumente el tratamiento fiscal a las altas, eliminando deducciones por EPSV, transmisión de acciones o por hijos. EH Bildu se ha mostrado también partidario de introducir estos cambios. Arantza Urkaregi ha defendido una única base imponible en la Renta y suprimir los beneficios por réditos del ahorro. En el Impuesto de Sociedades, la coalición abertzale ha puesto el acento en la deriva de la Diputación hacia un modelo «regresivo» de las deducciones. La aprobación de este proyecto normativo en un próximo Pleno permitirá que el tipo «real» de las empresas sea, según Urkaregi, «mucho menor» y que «cada vez se pague menos», lo que tendrá «efectos negativos en la recaudación».
