El apeadero provisional del TAV en Basauri funcionará al menos dos años
Se mantendrá operativo hasta que se ejecute el túnel de acceso a Bilbao, que suma un nuevo retraso: no estará construido antes de 2030
El apeadero que se habilitará en Basauri con el objetivo de que la 'Y' vasca pueda inaugurarse a finales de esta década permanecerá en funcionamiento ... durante al menos dos años. Desde que el Tren de Alta Velocidad empiece a circular en 2028 hasta que el acceso a Bilbao sea ejecutado. El nuevo cálculo es que el túnel de casi 7 kilómetros que unirá Zaratamo y Abando quede rematado, como muy pronto, a lo largo de 2030. Es el plazo que maneja el Ministerio de Transportes tras actualizar el cronograma de la obra, que acumula un nuevo retraso.
La primera razón de la demora es política. En diciembre de 2021 Pedro Sánchez se comprometió a ceder al Gobierno vasco las obras del túnel a Bilbao -y las del acceso a Vitoria- a cambio del apoyo del PNV a los Presupuestos Generales del Estado del año siguiente. Fue un acuerdo muy celebrado por todas las partes. Los nacionalistas consideraron que en manos de Lakua los proyectos quedarán blindados y podrán acelerarse, mientras que los socialistas reivindicaron su apoyo a unos proyectos que durante los mandatos de Rajoy no habían llegado a arrancar.
Aquel compromiso debe materializarse en una encomienda de gestión que, 14 meses después, sigue sin firmarse. El documento está redactado, de hecho el Gobierno vasco le dio el visto bueno el pasado abril, pero algo pasa en Madrid. Las fuentes consultadas sitúan el bloqueo en el Ministerio de Hacienda, el último que debe revisar el texto. Cuando reciba luz verde lo aprobará el Consejo de Ministros y el pacto interinstitucional se escenificará en un último acto de puro protocolo. Posiblemente en Euskadi. Posiblemente en plena precampaña.
El segundo freno para ejecutar los accesos del TAV a Bilbao es técnico. El Ministerio de Transportes espera aprobar este mismo mes el Estudio Informativo (EI) que permitirá redactar los proyectos constructivos del túnel y la nueva estación de Abando. Sin ese documento no se puede avanzar. Cuatro años lleva abierto el trámite burocrático.
A la espera de novedades, el tiempo corre. Según recoge el protocolo para la cesión de las obras del túnel que van a firmar los gobiernos central y vasco, que ha sido remitido al Parlamento a petición de EH Bildu, el plan era iniciar los trabajos en 2022 y culminarlos, como muy pronto, en 2029. El retraso en la firma de la encomienda de gestión y la aprobación del EI alarga el plazo, de momento, otro año. Y ahí gana protagonismo el apeadero de Basauri. El último cálculo del Ministerio de Transportes es que la 'Y' vasca quede ejecutada -sin las estaciones de Bilbao y Vitoria- a lo largo de 2027, por lo que, tras las pruebas de seguridad, el TAV empezaría a funcionar en 2028.
Conexión con el Cercanías
Inicialmente, las instituciones vascas no acogieron de buena gana la decisión del ministerio de instalar una parada en Basauri. Especialmente contrario era el Ayuntamiento de Bilbao, por eso de que lo provisional pudiera convertirse en permanente. La encomienda de gestión disipa las dudas advirtiendo de que solo podrá autorizarse la construcción del apeadero una vez que arranquen las obras del túnel hacia la capital vizcaína.
La parada de Basauri se ubicará en el viaducto del TAV que llega de Zaratamo saltando la BI-625 y el Nervión. Los viajeros bajarán del tren en el propio puente y descenderán en ascensor al nivel inferior del apeadero, en el que conectarán con el Cercanías que llega de Orduña. Aún no se ha aclarado si serán transportados hasta Bilbao en trenes lanzadera especiales o si tendrán que aguardar al paso de los servicios habituales de la línea C3.
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