El agua de la ría tiene niveles altos de lindane que no podrán ser eliminados antes de 2027
Un informe de Azti asegura que al Nervión llegan todavía filtraciones de depósitos incontrolados de este contaminante
La ría de Bilbao se ha regenerado, pero el lindane sigue presente en niveles altos en sus aguas más de 35 años después de que ... cerraran las fábricas que lo producían en Erandio (Nexana, junto al río Asua, se clausuró en 1982) y Barakaldo (Bilbao Chemical, en Ansio, bajó la persiana en 1987). Presenta un mal estado químico principalmente por la presencia de este contaminante debido a la persistencia de focos derivados de depósitos incontrolados, desde los que se va filtrando esa sustancia tóxica hacia el cauce de la ría, principalmente en el tramo desde Lutxana hasta la desembocadura en el mar.
Así lo confirma el último informe de seguimiento del estado de las aguas costeras y de transición realizado por Azti para URA, la Agencia de Agua del Gobierno vasco, que vaticina que esa contaminación no podrá ser eliminada antes de 2027. Según el estudio, el cauce de la ría de Bilbao incumple sistemáticamente los índices por lindane (HCA). Sufre una polución crónica por esta sustancia que se fabricó en la misma cuenca. A pesar de que la mayor parte de los residuos fueron tratados en la planta construida en Barakaldo o confinados en la celda de seguridad del Argalario, siguen existiendo aún focos de contaminación que afectan a las aguas. El veneno se filtra por la tierra hasta los arroyos y termina en el Nervión. De hecho, se han hallado concentraciones en los peces analizados también en el río Asua.
La contaminación por esta sustancia se ha detectado en cuatro de las cinco estaciones en las que se toman muestras en la ría. Aunque no se encuentra en la del puente de Deusto, las mayores concentraciones se producen en las estaciones cercanas al puente de Rontegi y Lamiako, cerca de la desembocadura del Asua, el Galindo y el Ballonti, mientras que en el Abra los niveles son menores por el efecto de la dilución del agua marina.
Asua, zona problemática
Para un mejor diagnóstico de la polución, la Agencia Vasca del Agua firmó un convenio con la Fundación Azti el 4 de enero de 2021 para estudiar en profundidad este contaminante también en afluentes y recoge muestras cada dos meses. Según el último estudio, los principales focos de contaminación son la escombrera Etxe-Uli, en Santurtzi, y otros vertederos (La Sia, Rivas Viejo y el de las Canteras) en las inmediaciones del río Ballonti, el antiguo vertedero de Artxanda -donde se realizan obras de remediación del suelo y se han retirado toneladas de lindane- y los suelos contaminados en las inmediaciones de los terrenos en los que se situaba la fábrica de lindano Nexana S.A en Erandio, situados junto al río Asua, uno de los puntos más problemáticos.
El plan de acción para eliminar el lindane de la ría de Bilbao está todavía en fase de elaboración
El entorno de Zuloko en Galindo también es un foco. Asimismo hay concentraciones significativas en el Gobela, y en el punto de control de lixiviado del vertedero de Lleuri, bajo el centro comercial Artea.
Los expertos de Azti estiman que «por la inercia de los focos contaminantes, el tiempo de resolución de la problemática probablemente se extenderá más allá de 2027». El Departamento de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente convocó por primera vez en 2020 una mesa de acción y social ante la contaminación por lindane, con la participación de diputaciones y de ayuntamientos afectados. El foro se reunió en mayo del año pasado. Hasta 2025 se pretende redactar una hoja de ruta y evaluar metodologías.
Los vertidos de Galindo y dragados merman la calidad del agua
El informe de la Fundación Azti sobre la calidad de las masas de agua de transición también analiza otros parámetros. Por ejemplo, peces y moluscos, que a su vez son grandes indicadores de la calidad del cauce. Según el análisis, la calidad biológica de los peces -y por lo tanto, de la masa de agua- alcanzó su máximo en 2012 pero ha caído hasta niveles de 2003 entre Deusto y la desembocadura, donde se habían identificado 20 especies. La tendencia también es negativa en los invertebrados bentónicos en la estación de Lamiako. Entre Santurtzi y el Puerto, la calidad biológica de las aguas se recupera tras caer en picado en 2019. El informe atribuye los descensos a «la cercanía al vertido de la depuradora de Galindo y a otras actuaciones que han producido retrocesos, como los dragados». Ambas situaciones, apunta, generan un impacto significativo sobre la fauna.
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