50.000 personas usan las bicicletas de Bilbao cada semana

Este domingo el coche ha tenido que sentirse más extraño que nunca al circular por el centro de Bilbao. Casi 1.000 cicloturistas de todas las edades y más de 300 personas se adueñaron de la calzada para participar en la carrera popular y en la marcha que salieron de El Arenal dentro de los actos centrales de 'Día sin mi coche', que puso el broche de oro a una Feria de la Movilidad de récord ya que desde el pasado jueves recibió la visita de más de 35.000 personas.

En la salida de ambas citas populares estuvo el alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto, quien destacó que la alta participación en los eventos organizados con motivo de la Semana Europea de la Movilidad demuestra que la ciudadanía está cada vez más sensibilizada en torno a la sostenibilidad, también al desplazarse. «Tenemos una ciudad muy manejable que se puede recorrer de punta a punta a pie o a pedales y con servicios como el de bicicletas municipales hemos conseguido acercar el centro a los barrios altos», resaltó.

«Ya no hay excusas. En Bilbao hay muchas cuestas, pero la bicicleta eléctrica ha conquistado la calle, ha traído la igualdad a la villa y da lo mismo la edad o la condición física porque ya se puede ir a cualquier lugar sin usar el coche», se congratuló el concejal de Movilidad y Sostenibilidad, Alfonso Gil. El responsable socialista remarcó que este servicio Bilbaobizi está consiguiendo resultados «impensables cuando el alcalde y yo entramos en el gobierno municipal». Y puso como ejemplo los 50.000 usos que las 450 bicicletas eléctricas municipales registraron en la primera semana de septiembre. «Antes de incluir las unidades eléctricas el máximo del servicio municipal estaba en 500 usos al día y ahora hemos llegado a alcanzar los 8.612 el pasado día 19. Hemos inundado las calzadas de Bilbao con bicicletas y ya somos una referencia en Europa», añadió.

Así lo entiende también el diputado de Transportes y Movilidad Sostenible, Miguel Ángel Gómez Viar, que confesó que «da gusto ver el cambio que ha dado Bilbao en esta materia. Si miras 25 años atrás, no tiene nada que ver, ahora es una ciudad accesible», remarcó antes de añadir que desde la institución foral se intenta apoyar está evolución con la mejora de servicios como el transporte público. Juan Mari Aburto también incidió en la necesidad de seguir avanzando con otras medidas, como la generalización del límite de velocidad en entornos urbanos a 30 kilómetros por hora y la creación de nuevos bidegorris. «Tenemos que seguir generando espacios para el uso y disfrute de la ciudadanía», añadió.

Uno de los que ya saben lo que es aprovechar el potencial de unas buenas rutas peatonales por el entorno urbano es Alfredo Gordeña. Forma parte de la asociación Nordic Walking Bilbao, creada hace un año y que todos los martes y jueves a partir de las ocho de la tarde se juntan frente al Ayuntamiento para recorrer la ciudad. «Ya me conocía el recorrido y no ha habido problema en hacer los 10.000 pasos -seis kilómetros- que pedía la organización», remarcó.

Tampoco los tuvieron la familia Rosillo (Marisol, Margarita y Luis) y María Consuelo Orruño, Agripina García y Julen López. «Hemos venido andando desde Bolueta sin problemas y hay que darle marcha al cuerpo para luchar contra el colesterol, que ya estamos jubilados y ahora las piernas ya no hacen todo lo que la mente quiere», bromeaban.

También Edurne Fernández y David Fraile aseguraban haber disfrutado al máximo de la jornada junto a su pequeña Lur, de cuatro años. Ellos se habían decantado por la bicicleta, «porque nos gusta mucho y las sacamos en cuanto sale el verano». La pequeña, eso sí, bien asegurado en el asiento trasero. También el propio alcalde mostraba su satisfacción tras el recorrido de 12 kilómetros en bicicleta eléctrica. «La verdad es que nunca la había usado y ha sido muy agradable y cómodo. Con ella, las cuestas de Bilbao se suben de otra manera. Y ni hemos sudado».