Absueltos 18 de los 19 condenados por los disturbios de Kukutza

La Audiencia Provincial de Bizkaia ha absuelto a 18 de los 19 condenados por los incidentes en la manifestación por el desalojo y derribo de Kukutza. El otro acusado por el gaztetxe de Rekalde ha visto como su pena se ha rebajado 4 meses.

Los 19 jóvenes fueron juzgados cuatro años después de que se produjese el derribo del gaztetxe. En su momento todos fueron condenados a nueve meses de prisión, pero ahora la Audiencia Provincial de Bizkaia ha revisado las penas.

El gaztetxe Kukutza, ubicado en el barrio bilbaíno de Rekalde, fue desalojado el 23 de septiembre de 2011. Durante la operación se produjeron graves incidentes, de los que han derivado tres procesos judiciales distintos. Además, la manifestación que convocaron para protestar por el derribo del local se produjeron importantes pérdidas materiales. Los 18 jóvenes que han sido absueltos participaron en esta marcha.

Un ertzaina fue condenado en noviembre de 2013 por la Audiencia de Bizkaia a pagar multa de 540 euros y una indemnización de 160 euros a una joven a la que propinó una patada. Por otra parte, hubo otros dos juicios por los incidentes en las manifestaciones y por los enfrentamientos en el propio desalojo del inmueble.

Por los altercados en el desalojo se juzgó a 23 jóvenes y todos fueron absueltos salvo uno. Este chico fue condenado a tres años de prisión por atentado contra la autoridad y arrojar objetos a los ertzainas. Su recurso ante la Audiencia Provincial ya ha sido visto y está a la espera de sentencia.

En cuanto a las manifestaciones, el juzgado de lo Penal número 3 de Bilbao condenó por desórdenes públicos, el pasado octubre, a nueve meses de prisión y una multa de unos 84.000 euros a 19 jóvenes. Sin embargo, la Audiencia de Bizkaia ha terminado absolviendo a todos menos a uno, tal y como se ha dado a conocer este martes.

El Grupo de Solidaridad con Kukutza (KET) ha destacado este martes en una rueda de prensa que el fallo de la Audiencia de Bizkaia, que agota el procedimiento, establece que la sentencia del juzgado de lo Penal de Bilbao era «contraria al derecho de manifestación» y condenaba a los procesados basándose «en exclusiva» en los testimonios policiales.