Encuentran a una perra cruelmente maltratada en un zarzal de La Peña

Perra vida. En ocasiones, el término cobra un brutal sentido. Es el caso de Alma, una perrita que fue encontrada el pasado miércoles salvajemente torturada en un zarzal de Buia, en el barrio bilbaíno de La Peña. La llamada de un vecino de la zona ya alertó de la presencia del animal, que tenía signos de haber sido agredido. Pero la estampa que se encontraron los laceros del servicio de recogida de animales fue dantesca. La perra, de raza pequeña, tenía la cabeza destrozada, estaba convulsionando y en estado de shock.

Los hechos acaecieron el pasado miércoles, 19 de noviembre, cuando el servicio municipal de recogida de animales recibió el aviso de que de que había un perro herido entre las zarzas, en una zona de maleza de Buia. Rápidamente la perra fue trasladada a la clínica veterinaria municipal, sangrando por la cabeza, la boca, la nariz y los ojos, que tenía prácticamente fuera de las órbitas. Ante la gravedad de las lesiones, los sanitarios procedieron a sedar al animal de inmediato para evitarle sufrimiento.

Atacada con un martillo

Tras realizarle unas placas, que revelaron la verdadera magnitud de las heridas, comprobaron que la pequeña perra tenía el cráneo fracturado y astillado y el cerebro estaba desplazado del mismo. Los venitarios sospechan que Alma pudo ser salvajemente golpeada con un objeto contundente, "probablemente un martillo", sostienen desde la asociación animalista Puppy Bilbao, que se han encargado de difundir el caso. A pesar de la rápida intervención de los veterinarios nada se pudo hacer por la vida del animal, al que tuvo que ser sacrificado.

Según han confirmado desde la asocición animalista, la perra contaba con chip de identificación. Al parecer, no fue hasta ayer cuando los dueños de Alma recibieron la trágica noticia al llegar al Servicio Municipal de Recogida. Ellos mismos aseguraron que su mascota llevaba desaparecida desde el domingo, 16 de noviembre y que no era habitual de la zona donde fue encontrada, por lo que sospechan que pudo ser robada y agredida en el mismo lugar o fue arrojada allí tras el brutal ataque.

Los vecinos de la zona, alarmados por tan horrible suceso, apoyan la iniciativa de la protectora para encontrar a los responsables de la mortal agresión a un animal indefenso y limpiar su barrio de indeseables. Desde Apa Puppy Bilbao hacen un llamamiento para que cualquiera pueda aportar detalles que esclarezcan lo sucedido lo haga a través de la dirección de correo electrónico apapuppy@puppybilbao.org.