140 asociaciones luchan por la salud en Bilbao: «Es un derecho fundamental»

La pandemia, que se ha cebado en mayor medida con los más vulnerables, ha vuelto a poner en primera línea una vieja realidad: las desigualdades afectan a la salud de la población y, a mayor exclusión, menor es la esperanza de vida. En Bilbao, que ya dispone de un plan municipal que estará en vigor hasta 2023, 140 organizaciones y asociaciones sociosanitarias de todos los ámbitos llevan décadas promocionando la salud comunitaria desde distintas ópticas. Todas trabajan en mejorar la calidad de vida de los vecinos: en curar sus adicciones, formarles en prevención, ofrecer una alimentación saludable a las personas sin recursos... Esta miércoles, con motivo del Día Internacional de la Salud, el área de Salud y Consumo homenajeó a cuatro de estas entidades y a la Organización Sanitaria de Bilbao, que agrupa al hospital de Basurto y a 26 centros de salud y ambulatorios de la ciudad.

La concejala del área, Yolanda Díez, destacó la «excelente» labor de las 140 entidades en prevención durante la pandemia que ha sumido a Bilbao en su año más negro en más de un siglo. «La salud es un derecho fundamental», recordó la edil, quien prometió que el Ayuntamiento va a «garantizar que todas las personas tengan condiciones óptimas de vida, servicios de salud de calidad y atención médica sin sufrir discriminación». Según explicó, «ahora vivimos uno de los peores momentos, pero en el mejor sitio, acompañados por los mejores profesionales y asociaciones». «La salud de nuestra gente es lo principal a preservar. Nuestro objetivo es que los ciudadanos vivan más y mejor. La salud tiene que estar en la conciencia para desarrollar este proyecto colectivo que se llama Bilbao», dijo el socialista Alfonso Gil, teniente de alcalde y coordinador del área.

La OSI Bilbao-Basurto lleva desde su creación atendiendo a los vecinos y colaborando con el Ayuntamiento. «Hemos puesto toda nuestra vocación y esfuerzo al servicio de los bilbaínos ante un enemigo cruel. Pero sabemos que esto no ha acabado aún. Nos quedan largos meses de intenso trabajo en los que todos pasaréis por nuestras manos, pero ahora para ser vacunados», explica la supervisora Ana Zorrilla.

La asociación Bizitegi se implicó en la atención sociosanitaria a la gente sin hogar durante el confinamiento con el apoyo local. «Se quedaron a la intemperie. El estado de salud de las personas sin hogar en Euskadi es peor que el del resto. Y no disponen de un hogar para descansar y recuperarse. Han sido invisibles para las normas que se han dictado, como el confinamiento y el toque de queda».

Desde 1961, la asociación La Cruz de Oro ofrece apoyo en Bilbao a todas las personas alcohólicas y recuperadas a través de seis grupos de ayuda mutua. Voluntarios rehabilitados trabajan en ella de forma altruista. «Ayudamos a unas cien personas, muchas de ellas poliadictas. La adicción es una enfermedad mental grave y, aunque la superes, siempre debes estar alerta», relata el voluntario Manuel Añón.

Avifes nació en 1986 para ayudar a las personas con enfermedades mentales. Sus 500 usuarios han sufrido de forma doble la pandemia, porque las restricciones han causado un mayor perjuicio a las personas con patología mental previa. «Gracias a los profesionales y voluntarios hemos salido reforzados. Han estado al pie del cañón», explica Rosa Cortijo, la usuaria que recogió el galardón.

La Asociación de Personas con Espectro Autista de Bizkaia atiende ahora a 1.500 chicos y chicas. «Para nosotros es un orgullo este reconocimiento, porque nacimos en Bilbao hace 43 años y nos ayuda a seguir mejorando. Este año ha sido especialmente duro para estas personas y se ha multiplicado su necesidad de apoyo. Se han alterado sus rutinas y vivido situaciones delicadas», dice el presidente.