«El club tiene unos buenos cimientos. Estamos muy cerca de no deber nada a nadie»
«Lo importante no era hacer la casa bonita por fuera, sino que se aguantara bien. Era algo fundamental y así se ha hecho»
- ¿Está en juego la permanencia y también la viabilidad del club?
Publicidad
- El club ha hecho unos buenos cimientos. Lo importante no era ... hacer la casa bonita por fuera, sino que se aguantara bien. Era algo fundamental.
- ¿Y se ha hecho?
- Así se ha hecho. Por eso no nos hemos vuelto locos fichando a jugadores que no podíamos fichar, para estar arriba. Es decir, que la casa estuviera bonita por fuera pero en ruinas por dentro. Lo importante de un proyecto es que los cimientos estén duros, fuertes, y ya por fuera irás adornando cuando puedas, cuando tu viabilidad te lo permita. Hay una máxima en Bilbao: 'No deber nada a nadie'. Me lo han enseñado en mi casa y también aquí. Si algo tiene ahora la gente del club es que lo lleva al máximo. Hasta que no se deba nada a nadie...
- Economía de guerra.
- Estamos muy cerca de no deber nada a nadie. Parece un paso pequeño, pero después de lo que hemos pasado para mí es lo más importante.
- Pase lo que pase, ¿Álex Mumbrú seguirá el año que viene en Miribilla?
- Ahora lo único que me gustaría es que hubiera gente en Miribilla. ¿Lo otro? No lo sé. Estamos en un momento demasiado importante como para pensar en mí o en lo que va a pasar el año que viene. Ahora lo importante es salvar este año, como sea. Por lo civil o por lo criminal. Lo estamos dando todo, el club, los jugadores y el cuerpo técnico. No podemos dejarnos nada en el tintero. Hay que tener claro que lucharemos hasta el final. Hasta el último segundo, hasta el último balón.
Publicidad
- El año pasado tuvo ofertas de equipos importantes. ¿Se arrepiente de no haberse ido?
- No. No me suelo arrepentir de lo que hago. Cuando hago las cosas es porque están meditadas. Para mí, la mejor opción era estar aquí. Cuando empezamos no pensamos en subir a la ACB y quedarnos, sino en crear un proyecto desde cero después de todo lo que había pasado. Era como si hubiese estallado una bomba y había que volver a empezar. Lo hicimos con mucha cautela, presupuestos bajos y sabiendo que íbamos a sufrir y pasarlo mal durante muchos momentos. Confiamos todos en ello. Nunca me he planteado nada de eso (marcharse).
- Hay cinco equipos separados por apenas dos triunfos. ¿Cómo ve las posibilidades de cada uno, la batalla en la parte baja de la clasificación?
- Todo puede cambiar de un día para otro. Tenemos demasiadas cosas en la cabeza y para hacer como para pensar en quién está bien o mal. Sabemos de la complicación del calendario.
Publicidad
- Pero es inevitable fijarse en lo que hacen los rivales.
- Sí, lo es. Una victoria de ellos puede dejarte un poco más abajo. Pero si te fijas mucho puedes frustrarte. Hay que hacer lo que controlas. ¿Qué te ayuda? Trabajar. Pues vamos a por ello.
Accede todo un mes por solo 0,99€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión