Fichajes Baskonia

El Gipuzkoa se interesa por Hanzlik, canterano del Baskonia

La directiva de Betoño se muestra tradicionalmente proclive a las cesiones desde hace décadas. Figuras entronizadas en el altar mayor del baskonismo cumplieron meritoriajes fuera antes de triunfar bajo la cúpula de Zurbano. Los casos de Scola (debut extranjero de menor edad en la ACB con la camiseta del Gijón), Nocioni (Manresa) y Splitter (Bilbao) -tres apóstoles de la causa azulgrana- figuran a la cabeza. Claro que aproximarse a sus enormes rendimientos pertenece casi al género de la ciencia-ficción.

El alero checo y el también tirador ruso jugaron la temporada anterior a préstamo en el Girona -que entrenaba Aíto García Reneses y presidía Marc Gasol- y el Fuenlabrada, respectivamente. El primero tuvo escaso protagonismo en el equipo catalán, pero menor aún fue el del segundo al sur de Madrid. Ferrán López, director deportivo del 'Fuenla' y exbase del Baskonia, ya comentó a este periódico con buena palabras que el 'tres' ruso de físico tan liviano estaba verde para la Liga Endesa. De hecho regresó a Vitoria de forma prematura.

El interés donostiarra por Hanzlik se fundamenta en un pasado de relaciones cruzadas. El actual responsable de los fichajes y las bajas en el GBC, José Luis Zubizarreta, mantiene desde hace tiempo una buena sintonía con Juan Pedro Cazorla, líder de la cantera azulgrana. El primero trabajó anteriormente en el Iraurgi de Azpeitia, conjunto de la LEB Oro en el que cuajaron actuaciones muy notables el propio jugador checo, Savkov y Cissoko, el base con quien el Baskonia ha recaudado un dinero importante por su establecimiento en San Antonio Spurs (NBA).

Así que el deseo de incorporar al alero que intervino el curso pasado en Girona descansa sobre la opinión de dos padrinos. Además del director deportivo, el nuevo entrenador guipuzcoano (Mikel Odriozola) ya perteneció al cuadro técnico azpeitiarra cuando el checo actuó allí en calidad de cedido. Ambos lo conocen y piensan que puede ofrecer un buen rendimiento en la segunda categoría del baloncesto español, distante de la ACB en cuanto a la exigencia física al menos.

Desde ya hace una década, y salvo las intermitencias de Ilimane Diop, Tadas Sedekerskis es el único representante de la cantera azulgrana reclutado en edad juvenil que ha conseguido un verdadero estatus dentro del primer equipo vitoriano. Un elemento valioso de primer orden, el lituano, al margen de su condición de cupo formativo -cuatro como mínimo- que los clubes de la ACB deben de inscribir.

De hecho, el estonio Raieste afronta el último año de su contrato en la capital alavesa con la necesidad de avanzar un firme paso adelante para no seguir el camino de su excompañero Arturs Kurucs. El letón ha salido este verano al Promitheas Patras de la Liga griega.

Un caso peculiar es el de Ilimane Diop, que abandonó hace dos ejercicios Betoño tras pertenecer ocho cursos a la estructura azulgrana y desempeñar, incluso, la capitanía del conjunto profesional. Desde entonces, una temporada en Gran Canaria, otra en Murcia y ahora con un vínculo temporal de seis semanas, que culmina a finales de este mes, con el club de Málaga mientras se repone el lesionado pívot cajista Yankuba Sima.