Camino de perfección

La diferencia es que, ahora, no hay posibilidad de rectificación. El Kirolbet saltará esta noche al parqué del Buesa Arena con el filo de la eliminación apretando en sus constantes vitales. Debe superar al CSKA para igualar la serie y forzar un quinto encuentro de desempate en Moscú. No hay otro camino para intentar alcanzar la Final Four que acogerá Vitoria entre el 17 y el 19 de mayo. El Baskonia, que aterrizó en ventaja desde la capital moscovita tras su histórico triunfo en el segundo encuentro, está ahora contra las cuerdas. Son los vaivenes de todo play off, la turbulencia extrema que se puede llegar a experimentar a estas alturas de competición y ante un oponente de las dimensiones del CSKA.

Después de tres encuentros disputados, las cartas están boca arriba en ambos bandos. El conjunto vitoriano tiene más que claro que debe avanzar por un camino de perfección para encontrar unas debilidades del rival no tan manifiestas. En el primer asalto en Vitoria, el conjunto ruso mostró su capacidad de reacción para volver a dominar el choque desde la vertiente física y el talento, dos ingredientes claves para el éxito en cualquier batalla continental. Los pecados azulgranas en el tercer asalto son ya conocidos; sus momentos de debilidad reboteadora, la escasa eficacia en los tiros libres y una puesta en escena en el primer cuarto de baja dureza defensiva. Queda constatado que el nivel de agresividad con que se arranca cada partido tiende a marcar el tono de cada rival y, de paso, otorga algunas pistas al trío arbitral.

Esta noche, Luigi Lamonica comanda la terna de colegiados que completarán el ucraniano Borys Ryzhyk y el turco Emin Mogulkoc. El italiano, que ya pitó el primer duelo de la serie, no está, ni mucho menos, en un puesto alto en la lista de preferencias de la entidad de Zurbano. En cualquier caso, hay cuestiones prioritarias que resolver en el bando azulgrana antes de mirar con susceptibilidad a los colegiados asignados.

Vincent Poirier, el gran pulmón azulgrana en la serie, realizaba una breve reflexión antes del entrenamiento vespertino de ayer respecto a los puntos de mejora. «La defensa que hicimos en la primera parte no fue buena. Anotaron demasiado. Debemos ser más agresivos y estar más concentrados en nuestro plan de partido. Es la clave», apuntaba el pívot de Clamart. Su arenga era clara. «Sabíamos que iba a ser una serie dura. La guerra todavía no ha terminado. Tenemos un partido más en casa para creer».

El argumento de la defensa y de la constancia domina el discurso azulgrana. Sin embargo, todavía se ganan los partidos sumando más puntos que el rival. El ritmo anotador azulgrana ha tenido sus cortocircuitos a lo largo de la serie. El bajo porcentaje de tiros libres fue un problema serio en el tercer encuentro, pero hay una constante que marca el rendimiento ofensivo de los dos contendientes. El Baskonia necesita dominio reboteador para poder correr y evitar atascos en el juego a media cancha, una asignatura en la que no es brillante. Además, necesita, al igual que el CSKA, de un alto nivel de acierto en el triple. Los rusos firman un 40 % desde más allá de la línea de 6,75 mientras los azulgranas van a la zaga con un 31 %. Entre la batería habitual de artilleros triplistas de Perasovic se dan ciertas fluctuaciones. Mientras Hilliard mejora su puntería (44 %), los dos bases no terminan de sentir el aro, lo que supone un problema para desatascar el ataque. Vildoza presenta un 13 % y Huertas un 20 %. Tampoco halla el tino Voigtmann, autor de un único triple de doce intentos en toda la eliminatoria. Para colmo, la casi segura ausencia de Janning hace que el conjunto azulgrana se quede sin su principal especialista en el tiro lejano.

Con un desgaste notable sobre sus espaldas y presionado por el riesgo de eliminación, el Baskonia también pelea contra la dinámica imperante en los play off de la Euroliga desde que se instauró a partir del curso 2008-09 el formato al mejor de cinco encuentros. En este período, ningún equipo en desventaja de campo ha logrado salir vivo tras estirar la serie hasta el quinto partido.