Vencedor se gana la confianza

La diferencia entre las dos decisiones, sin embargo, es significativa. Y tiene que ver con el crecimiento de un futbolista como Vencedor y la irregularidad de otro como Unai López. Mientras uno se asienta poco a poco en los planes de Garitano, el otro va y viene, aparece y desaparece, y el tiempo, los partidos y las temporadas van pasando. El ejemplo no hay que buscarlo demasiado lejos. Sirve con esta temporada. Mientras Unai López empezó como un tiro, haciéndose casi fijo en la medular, Vencedor tardó un buen tiempo en dejarse ver en las alineaciones de Garitano. De hecho, el guipuzcoano fue titular en seis de los ocho primeros partidos que jugó el Athletic y pareció que por fin se había convertido en el director de orquesta que tanto Garitano como los propios aficionados demandaban de él. Hasta fue capaz de marcar los dos goles de la victoria ante el Eibar, doblando su producción anotadora cosechada hasta entonces en el Athletic. Además de ideas en el centro del campo, se le pedía llegada y en Ipurua lo demostró con dos remates desde el borde del área.

Pero la derrota de la novena jornada ante el Valladolid marcó un antes y un después. Y Unai López quedó claramente señalado en aquel partido de Zorrilla. Unai Vencedor, recién ascendido a la primera plantilla esta temporada, apenas había jugado 16 minutos hasta la décima jornada, los 10 de su debut en Granada, y los seis de la victoria ante el Levante en San Mamés. Pero Garitano revolucionó su once para el duelo contra el Betis y apostó por el de Rekalde formando una pareja inédita con Vesga en el mediocentro. El 4-0 de ese partido y su rendimiento convencieron a Garitano de que su apuesta era acertada. Vencedor siguió en el once contra el Celta y el Getafe, descansó contra el Valencia y fue titular en un examen de tanta altura como frente al Real Madrid en Valdebebas. Y el centrocampista bilbaíno salió airoso de aquel esfuerzo en inferioridad. Porque si algo ha demostrado es que siempre está bien posicionado, que tiene facilidad para ver el juego y que casi nunca se complica la vida.

Frente al Huesca, Garitano se volvió a aferrar a sus principios y dio la titularidad a Dani García y Vesga. No funcionó una vez más esa mezcla, y Vencedor entró en la segunda parte para jugar con su pareja favorita. ¿El resultado? Una mejoría evidente. Porque junto a él, Vesga se encuentra más liberado para cortar balones y presionar más alto, mientras que por delante, Berenguer, Muniain y Williams siempre se entienden e interactuan mejor cuando Vencedor está presente en el terreno de juego.

Por contra, Unai López ha vuelto a perder su sitio. En las seis últimas jornadas, solo ha tenido dos apariciones en el equipo, y ambas como suplente. 28 minutos en la derrota contra el Celta y medio tiempo frente al Valencia en Mestalla, donde su presencia se dejó notar. Sin embargo, para Garitano no debió de ser suficiente y le ha relegado a la cuarta plaza entre el grupo de mediocentros con los que el técnico de Derio suele combinar. Tanto Vencedor como Dani García y Vesga han tenido más minutos en esas seis jornadas citadas. Pero nunca se sabe cual será la próxima combinación de Garitano. Toca esperar al martes frente al Villarreal.