Etxeita cumple y San José dirige

Era lo previsto, que Vicente del Bosque le diera la alternativa tras lograr el viernes en Logroño el billete para la Eurocopa de Francia. Y más de una hora antes del inicio del encuentro, se confirmó. Xabi Etxeita (27 años) se vestía de internacional y debutaba con la selección que defenderá el trono del Viejo Continente en 2016. Cumplió el central de Amorebieta. Fue titular junto a un Mikel San José que, desde la posición de pivote, dirigió con solvencia a La Roja, ejerció de faro e inició el juego, aunque nada más arrancar la segunda mitad no llegó a un balón de cabeza que asustó: eso sí, le anularon un gol poco después. El vizcaíno, el octavo internacional absoluto del actual Athletic, debutó con triunfo ante una Ucrania que quemaba su última bala (pudo anotar varios tantos si no es por De Gea).

Sonaba el himno. Aparece San José. A su lado, Azpilicueta, otro navarro... Y, a continuación, Etxeita, escoltado por Nacho, el central del Madrid con el que compartió el eje de la zaga que protegió, con más de un sobresalto, el marco de un De Gea espectacular, sobresaliente. Con el 14 a la espalda -su compañero, campeón de Europa sub21, portaba el 6 habitual-, buscó en sus primeros pases al navarro. Automatismos. La costumbre. San José, por su parte, bajaba a por la pelota para luego buscar a Thiago y Cesc, ayer capitán en su centenario. De hecho, en el minuto 9 un robo del navarro propició un contragolpe que Fábregas tiró arriba. También tenía tendencia a mirar hacia la derecha, la banda por la que subía el otro debutante en Kiev: Mario Gaspar, autor del gol triunfo.

Con la posesión de España (al final del primer tiempo casi del 70%), Etxeita, debutante número 58 de la era Del Bosque, disfrutaba de un debut plácido en la helada noche de Kiev. No tenía excesivo trabajo. Aunque Kavrets, en un mano a mano, le ganó en velocidad. Eso sí, surgió el portero del United con un nuevo paradón. Poco a poco, se volcó Ucrania y, por ejemplo, a la media hora, el pie del vizcaíno -el futbolista 99 nacido en este territorio histórico que milita en La Roja- evitó el empate. Mágico, a tiro de Garmash. Sin tregua, firmó una falta táctica en el centro del campo para cortar un peligroso ataque. Luego protagonizó, atento, otro despeje eficiente. Y San José, que felicitó de manera afectuosa a Mario en el gol, sonriente, se soltó con un disparo desde fuera del área. Corría el minuto 35. Nada.

Con el estreno de la segunda mitad, dejó San José un error de cálculo que permitió a Yarmolenko fusilar la meta española. Pero estaba De Gea. ¡Qué nivel! Van Gaal tiene que estar dando las gracias a la extraña negociación fallida con el Madrid. Era su noche, pero también la de Etxeita, que cumplía un sueño, premio a la insistencia, a realizar su labor de manera callada y, pese a no contar para el míster, trabajar para revertir la situación. Lo dejó claro Joseba Etxeberria, ayudante de Txingurri, en Twiter nada más conocerse la alineación. «Suerte a San José y especialmente a Etxeita en su debut. Recompensa al trabajo duro diario en silencio. ¡Zorionak Xabi!».

Darse por satisfecho

Y el central, concentrado siempre, puede darse por satisfecho con este debut, tanto por lo mostrado en el césped como por lo que significa este momento: nunca se rindió en Lezama, y ya forma parte de uno de los mejores combinados del planeta. Antes había estrenado la camiseta roja San José, amonestado por frenar una contra de Ucrania. De inmediato, se repuso para birlar un pelota y encender un contragolpe. Poco después, tras una jugada de videojuego -de aquellas que fabricaban los magos Iniesta y Xavi-, y varios rechaces, marcó. Pero el árbitro lo anuló por falta previa de Alcácer. Pasaba el tiempo y el cuadro local lo intentaba. No lo logró. Etxeita recordará que debutó con victoria y que San José, su cicerone, activó a su equipo, e incluso salvó al final, con la cara, una diana cantada.