Una noche de inspiración

El Athletic debía demostrar que la derrota frente al Barcelona no había afectado para nada en la confianza y en el juego. Hubo muchas novedades en el once inicial, pero la puesta en escena fue buena. Con las ideas (como siempre) muy claras. Ejerciendo una buena presión alta y muy bien posicionados en el campo.

Durante los primeros 25 minutos, los rojiblancos fueron superiores, aunque faltó precisión para crear peligro. Fruto de esta buena y ordenada presión del Athletic, el Betis no se acercó a la meta de Simón.

Tras un mal despeje de Yeray , el balón le cayó a Canales, que desperdició la mejor ocasión del partido. Esa acción dio alas al Betis y el Athletic se resintió.

A este dominio andaluz, ya en la segunda parte, el Athletic respondió con dos buenas acciones ofensivas. Y como era de esperar, Marcelino oxigenaba el equipo con Willians por Villalibre, primero; y después a Capa y Vencedor por Lekue y Dani García.

A falta de cinco minutos, llegó el jarro de agua fría para el Athletic. El gol de Juanmi, que dejó en la lona a los rojiblancos que parecían incapaces de reaccionar. Pero la fe de este equipo es infinita y nunca se le puede dar por muerto. Raúl forzó la prórroga, se llegó a la tanda y hoy estamos en el sorteo de semifinales.