Quedaba una cuenta pendiente desde hace décadas y había que hacerlo con toda la afición festejando.
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En 2021 este periódico me encargó realizar la portada ... del especial de aquella carambola de finales postpandémicas. Recurrí al busto de la estatua de Pichichi situada en San Mamés, mezclado con una espiral cósmica de líneas en las que se podían leer los años en los que el Athletic había ganado una Copa. No sabia entonces que el número que debía poner no era 2021 sino 2024. Dije en aquel momento, que el Athletic tiene una misión histórica en Sevilla y no me equivoqué de lugar pero sí de tiempo.
Hay algo de pasar de siglo en esta victoria. Los que eran leyenda pasan a ser mitos, con base histórica y los que conquistan el trofeo pasan hoy a ser leyendas a tiempo real. Aquella Copa se ganó ayer, porque anteriormente no se podía hacer sin el público, sin la calle. Y nuestra afición es parte del equipo. Hace unos días le comentaba a Jon Agiriano haber tenido una sensación sobre un patrón de acontecimientos invisibles que percibía esta temporada. Hablamos de fábula, de tradición oral . Para los mas pequeños aquella historia fabulosa, gabarra, de final de Copa legendaria se hace hoy tangible por el triunfo en La Cartuja.
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