Bruno Fernandes, el flotador al que se agarra el Manchester United
El crack portugués, el único futbolista de los 'red devils' que mantiene el nivel en cada partido, pide «ira» y «valentía» ante el Athletic
En este Manchester United que se juega en San Mamés no solo un título sino su futura participación en la Champions hay un jugador que ... destaca por encima del resto. En una plantilla con apenas cuatro futbolistas ingleses -sin contar porteros reserva ni canteranos residuales- es un mediapunta portugués el que tira del carro e intenta salvar el honor de un equipo histórico venido a menos en la última década. Bruno Fernandes (Maia, Oporto) es el flotador al que se agarra un conjunto en ruinas.
55 millones de euros mediante en enero de 2020 procedente del Sporting de Lisboa, el suyo es uno de los pocos fichajes que han funcionado en los últimos años. En Old Trafford se cuentan con los dedos de una mano. Desde que lograra su última Premier en 2013, los 'Diablos Rojos' se han pulido dos mil millones de euros en traspasos, a una media de 171 millones por curso. En ninguna campaña han tenido un balance positivo, es decir, nunca han vendido por más cantidad de la que han fichado.
Un derroche constante de dinero que se ha traducido en apenas dos títulos de FA Cup y otros tantos de la Copa de la Liga, al margen de la Europa League del 2017. Solo dos subcampeonatos y dos terceros puestos en la competición doméstica tratan de camuflar una tendencia preocupante en un conjunto que dominó Europa de la mano de Cristiano Ronaldo, Rooney y compañía bajo el manto de Ferguson.
Bruno Fernandes es el ídolo de una afición que se encomienda al luso para salvar la temporada. Como capitán no duda en alzar la voz para activar a sus compañeros. La última vez que lo ha hecho fue este pasado domingo, cuando en el descuento, una vez en superioridad numérica, salvó un punto ante el Bournemouth de Iraola. A falta de cuatro jornadas el United es decimocuarto con 39 puntos, tiene imposible clasificarse a Europa vía Premier y no ha sufrido por el descenso gracias al pobre nivel de Southampton, Leicester e Ipswich, ya en Championship.
«Necesitamos tener más ira que los defensores para conseguir el balón. Necesitamos estar enfocados en todo lo que hacemos en los entrenamientos. Ya deberíamos haberlo hecho», afirmó con dureza tras el duelo ante los 'cherries' dirigidos por el exjugador rojiblanco, último rival de los de Rúben Amorim antes de visitar San Mamés (jueves, 21 horas). «Ambos equipos son muy intensos, con extremos muy rápidos que son muy buenos en uno contra uno», valoró sobre los de Valverde. «Ahora tenemos tiempo para intentar enfocarnos en lo que va a hacer el Athletic, pero tenemos que concentrarnos en lo que vamos a hacer nosotros, ser valientes», agregó Fernandes, que reconoció que el conjunto 'red' «no está en su mejor nivel».
Asiduo a los dobles dígitos
La tendencia en el Viejo Continente, sin embargo, se revierte para convertirlo en un equipo temible. De hecho, es el único de la Europa League que no conoce la derrota. Sí el sufrimiento. Solo hace falta ver la remontada agónica en Old Trafford en cuartos de final ante el Olympique de Lyon o la manera en la que se clasificó en octavos frente a la Real Sociedad. Aquel día Oyarzabal puso en ventaja a los de Imanol, pero Bruno salió al rescate con un 'hat-trick' (dos de penalti).
El ex del Udinese y la Sampdoria -llegó al profesionalismo en Italia- cuenta con cinco goles y cuatro asistencias en el torneo continental, el mismo en el que tiene una espinita clavada desde aquella final perdida en 2021 ante el Villarreal en la tanda de penaltis. El United, en fin, se aferra a su magnífica constancia. Esta temporada lleva 17 dianas y 18 pases de gol. Desde la 2017-18 siempre ha contabilizado dobles dígitos en ambas estadísticas. Además, y pese a sus treinta años, es el jugador más valioso de la plantilla: 55 millones. Así le tasa el portal especializado 'Transfermarkt', que suele penalizar a los futbolistas menos jóvenes.
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