Djaló ya es jugador del Al Gharafa, al que se marcha cedido una temporada

Llegó a Doha hace una semana, pero hasta ayer no se hizo oficial su marcha al fútbol catarí. Álvaro Djaló, el fichaje de los quince millones de euros, se marcha cedido al Al Gharafa, club dirigido por Pedro Martins. Aquel rendimiento que motivó al Athletic a lanzarse con todo a por su incorporación hace un año. Sin embargo, su pasado curso en San Mamés quedó muy lejos de las expectativas y jugará la próxima temporada en la exótica liga de Catar, a años luz de la española en cuanto a nivel. Ibaigane informó de que «la operación incluye una opción de compra no obligatoria sobre el delantero».

El futbolista de 24 años, nacido en Vallecas pero criado en Begoña, llegó la pasada temporada al Athletic después de una espectacular temporada en el conjunto luso, tanto en la Champions como en la competición doméstica. Anotó 14 goles, cinco de ellos en la máxima competición continental, e Ibaigane destacó de él cuando hizo oficial su contratación su capacidad para jugar en punta, de media punta, y también en cualquiera de las dos bandas.

Sin embargo, Djaló no convenció a Ernesto Valverde. Quizá la presión de llegar con el cartel de estrella al ser el tercer fichaje más caro de la historia del club (15 millones más cinco en variables) por detrás de Iñigo Martínez y Yuri, la adaptación a un nuevo vestuario y a una competición le pesó en demasía. Aunque vino a Bilbao avalado por unos grandes números, solo marcó un gol y contó con escasas oportunidad hasta el punto de ser el número 22 en minutos en la plantilla.

Ahora en Qatar buscará reencontrarse consigo mismo. Allí coincidirá con el exmadridista Joselu Matos y el guardameta Sergio Rico. El Al Gharafa es una entidad que ha ganado la última edición de la Copa del Emir de Qatar –la Copa del Rey en España–, y la cuarta en valor de mercado. En la última liga terminó tercero a once puntos del campeón, el Al-Sadd. Este próximo ejercicio jugará la Liga de Campeones de Asia, que comenzará a mediados de septiembre.

El veloz extremo no tuvo minutos en el primer amistoso en Urritxe ante la Ponferradina el sábado 19 de julio. Dos días después ya se entrenaba en solitario en Lezama. Y el martes 22 se desplazó a Doha para cerrar el acuerdo con su nuevo equipo, por lo que no entró en las convocatorias para los duelos en Laguardia frente al Alavés –quedó descartado el mismo día después de que en principio apareciera convocado– y en Eindhoven contra el PSV.

A finales del curso pasado Valverde tuvo palabras de ánimo hacia el dorsal número once. «Álvaro lo intenta siempre, es verdad que igual no ha jugado todo lo que él podía esperar, también lo es que tuvo la lesión del día del partido en casa del Betis y ha estado mes y pico parado. Y también es cierto que tiene mucha competencia en esos puestos en el Athletic, está claro que no es fácil... Desde luego yo sí veo que él lo intenta y que nosotros esperamos lo mejor de él». La llegada de Robert Navarro y la continuidad de Nico Williams hacían muy difícil su continuidad en La Catedral. Con contrato en el Athletic hasta 2029, se ganará su regreso a miles de kilómetros.

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