Revelador ensayo general

Ensayo general. Revelador. Con el once que previsiblemente se enfrente al Betis en el primer partido de Liga –solo Ximo oposita a entrar–. La constatación de que al Alavés le falta tiempo para afianzar su apuesta. Y la confirmación de la fragilidad defensiva como el principal punto débil de un equipo que, con evidentes carencias que deben corregir los últimos fichajes, progresa en la idea colectiva agarrado a la calidad de sus delanteros, Lucas y Joselu, que han vuelto a exhibir su fructífera conexión ante una Real Sociedad plagada de jugadores del filial –solo Moyá, Sagnan y Bautista con dorsal del primer equipo–. El resultado, empate a dos, no es lo más importante en pretemporada. Pesan más las conclusiones de Machín, que debe pulir los conceptos que ya va cogiendo el bloque y, sobre todo, tratar de corregir esos errores traseros que ensucian las cosas buenas que empieza a hacer este nuevo Alavés.

Presentadas fundamentalmente en la primera parte. Aún falta chispa, se nota el plomo estival en las piernas. Le ha faltado frescura y claridad con el balón. Le ha faltado ritmo. Pero el conjunto albiazul ya ha lucido como un equipo compacto en la presión, más acertado en el reparto de espacios. Más equilibrado. Las coberturas de los centrocampistas a la espalda de carrileros han minimizado las concesiones atrás. También Pacheco ha estado más atento a los balones largos. Y solo ha tenido que lamentar una incursión de Lobete, cerca ya del descanso.

Con el mando del partido y del marcador desde que en el minuto 6 Lucas ha hecho el 0-1, habilitado en el área por Joselu, que ha bajado con el pecho un envío largo, la posesión era del 'filial' realista, pero ha hecho más daño el Alavés. Ya en el tramo final, ha amenazado la portería de Moyá con una internada de Luis Rioja culminada con un disparo flojo de Joselu y una llegada desde atrás de Pina.

Las carencias se han evidenciado en la segunda parte, cuando el equipo vitoriano ha empezado a acusar los minutos en las piernas –90 para todos los presumibles titulares, pensando ya en la Liga–. En el minuto 58 Bautista ha aprovechado el agujero en el centro de la zaga para forzar un penalti de Laguardia que él mismo ha transformado en gol. En el 64, justo después de una buena ocasión de Joselu fabricada por Edgar, menos incisivo esta vez, Aldasoro se ha colado en el área por el centro para batir a Pacheco.

Todos los males albiazules concentrados en seis minutos. Como ante el Athletic, el rival hace mucho daño con poco. La apuesta de Machín expone al equipo atrás y hay que afinar en la colocación, las marcas y el cierre de espacios para no dar esas facilidades. Y falta un central con unas características precisas. En Zubieta, al menos, el Alavés ha reaccionado para igualar el duelo. Lucas y Joselu de nuevo. Con la colaboración de Pons, que ha conectado con el coruñés, cuyo centro desde la banda izquierda ha sido culminado por el de Silleda en el área. Una asociación para la esperanza. Siempre que se subsanen los errores defensivos.

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