Nikola Maras, sigue siendo una incógnita a la vuelta de su cesión
Defensa central ·
Belgrado (Serbia), 1995. Tercera temporadaNikola Maras es una de las grandes incógnitas de este Alavés. Lo es, en realidad, desde el verano pasado. Entonces volvía de una grave lesión sufrida el año del ascenso y le costó ponerse al nivel físico de sus compañeros durante la pretemporada. No llegó a entrar en el equipo y su papel se limitó a los partidos coperos ante rivales de inferior categoría. No contaba en los planes de Luis García, hasta el punto de que en invierno salió cedido al Levante pese al déficit de efectivos en el eje de una zaga que durante el mes de enero perdía además a Abqar por su participación en la Copa de África con la selección de Marruecos.
En el equipo granota volvió a gozar de cierta continuidad, pero sin demasiado protagonismo (ocho partidos). Y ahora, con contrato hasta 2027, ha regresado en busca de un hueco que no tiene garantizado. En un contexto incierto. Al inicio de la pretemporada parecía partir en desventaja, como un serio candidato a salir del conjunto vitoriano, pero las circunstancias le han convertido en uno de los jugadores con más minutos durante la preparación estival y con muchas opciones de partir en el primer once liguero que salte al césped de Balaídos.
A partir de ahí, su rendimiento, la situación de otros compañeros de la defensa y las posibles incorporaciones dictarán sentencia sobre su futuro en el plantel babazorro. Todos los escenarios son posibles.